Romelio Gualán, presidente de la CNC-“Eloy Alfaro”, se solidarizo con las compañeras y compañeros que se encuentran ejerciendo su justo y constitucional derecho a manifestar su descontento sobre varios artículos del proyecto de Ley de Aguas.
Mes: julio 2010
Movilización Plurinacional se Radicaliza en el País
En Asamblea Plurinacional en defensa del Agua, compañeros y compañeras de las diferentes organizaciones sociales, indígenas, afroecuatorianos, campesinos, estudiantes, grupos de mujeres, defensores del manglar, obreros y trabajadores, se sumaron a la radicalización de la movilización por la:
- Declarar la UNIDAD de las organizaciones CONAIE, FEINE, FENOCIN, y nos ratificamos y llamamos a la radizalización de la movilización nacional en defensa de la vida y el agua.
- Mantener el respeto a la diversidad y la autonomía de las organizaciones.
- Avanzar en las acciones y movilizaciones unitarias y conjuntas por el cambio y la transformación del modelo de Estado neoliberal para construir el verdadero Sumak Kawsay (Buen Vivir)
- Coordinar e impulsar a nivel local, regional y nacional la construcción de una verdadera agenda legislativa, que tenga como base los derechos consagrados en la Constitución y los instrumentos internacionales.
- Exigir al gobierno nacional el respeto a las organizaciones legítimamente movilizadas en ejercicio de sus derechos a la participación y a la resistencia. Denunciamos las agresiones violentas del gobierno con las detenciones, desalojos y heridos de los pueblos indígenas, campesinos y afroecuatorianos del país.
- Exigir a los asambleístas que surgieron y están vinculados en nuestras organizaciones continuar en la lucha por el cambio, por el respeto y la defensa de las propuestas impulsadas desde nuestras organizaciones.
- Las organizaciones se mantendrán vigilantes de nuestras autoridades en el cumplimiento de los mandatos de las organizaciones construidos alrededor de estos acuerdos.
El Agua, no se vende,
FENOCIN frente a la movilización por la ley de aguas
2) Protección del medio ambiente (explotación minera 2.5 km de distancia de fuentes de agua; protección de manglares regulando la explotación camaronera),
Ecuador: FENOCIN participa en debate de Ley de Aguas
Mujeres Rurales Nicaragüenses tendrán tierra para trabajar
La Vía Campesina apuesta a consolidar alternativas frente al cambio climático
Por el respeto de los derechos laborales
Respeto a sus derechos laborales, un salario justo para la jornada laboral, cumplimiento a los derechos establecidos en la legislación nacional, fueron algunas de las principales demandas de miles de trabajadoras y trabajadores que participaron de la marcha este 1 de mayo.
Hombres y mujeres provenientes de diferentes departamentos del país, se unieron a la marcha en el marco del 1 de mayo Día Internacional del Trabajo. Se denunció las violaciones que constantemente viven miles de personas en sus respectivos lugares de trabajos al no cancelárseles el salario mínimo, prestaciones de ley y no gozar de jornadas de trabajo de 8 horas. Asimismo, resaltaron la violación hacia los derechos de las mujeres, que no tienen acceso al seguro social, y ambientes adecuados para el desarrollo de sus labores.
En el pronunciamiento final los manifestantes señalaron que el actual gobierno dirigido por Álvaro Colom, los intereses de los sectores empresariales son mejor representados, mientras los trabajadores y trabajadoras continúan siendo explotados en los diferentes sectores laborales mencionando a las maquilas, empresas de seguridad privadas, constructoras donde emplean mano de obra barata (albañiles), y casas particulares.
Señalaron que los mismos abusos sufren los pobladores indígenas y campesinos, Rigoberto Monteros de La Coordinadora Nacional Indígena y Campesina CONIC, indicó que en las fincas cañeras los empleados son explotados ya que por tonelada de corte de caña se les paga de Q 8.00 a Q.10.00 quetzales, señaló que los finqueros no contratan a las personas sino utilizan el método de mano libre en donde solo emplean la mano de obra por temporada sin comprometerse a pagar las prestaciones de ley. Monteros señaló, que el trabajo de las mujeres es empleado en su mayoría en empresas empacadoras de banano, en donde las jornadas laborales son extendidas hasta de 12 horas, y en su mayoría no se les cancelas horas extras.
Rodrigo Pop de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas CNOC, catalogó como crítica la situación de las y los trabajadores del campo, señaló que en varias empresas, ya sean fincas o haciendas, de varias comunidades los terratenientes cancelan entre Q.22.00 a Q.40.00 quetzales diarios, y se burlan de las autoridades encargadas de velar por el cumplimento de los derechos laborales, porque los finqueros cuentan con dos planillas una interna para ellos, y la otra es la que presentan a las instituciones como el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social IGSS y al Ministerio de Trabajo.
Miles de trabajadoras y trabajadores reafirmaron que el futuro del país depende de la generación de condiciones de trabajo decente, de la construcción de una verdadera democracia participativa y como pilares de la misma, del pleno respeto a la libertad sindical, al dialogo social efectivo y de buena fe, de una reforma agraria y tributaria de naturaleza integral, soberanía alimentaria y energética. Esa voz de reclamo y justicia de la clase trabajadora se hizo sentir, este primero de mayo, en las principales calles y avenidas de ciudad Guatemala.
Bolivia: CSUTCB, el peso de la historia
La Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) se constituye hoy en un indiscutible referente político y sindical para los sectores mayoritarios que son parte del Estado Plurinacional. Los trabajadores del agro han sido protagonistas de singulares luchas contra el colonialismo interno que en el curso de la vida republicana ha intentado someterlos, diezmarlos o en el mejor de los casos asimilarlos a toda costa.
La resistencia marcó la existencia de las comunidades campesinas de oriente a occidente que, en la práctica, cerraron filas y mantuvieron intactas sus formas de organización social, sus ritos, sus usos y costumbres, en fin, su cultura.
La historia de las luchas sociales en Bolivia no puede separarse de la acción liberadora del movimiento indígena campesino, y el mismo proceso que hoy vive Bolivia, bajo el liderazgo del presidente Evo Morales, tiene su sello y constituye su peso moral.
Es bueno recuperar la memoria histórica que explica la fuerza de la CSUTCB. Parte de esa memoria permite remontarnos al 15 de noviembre de 1971, cuando en la población de Ayo Ayo, provincia Aroma del departamento de La Paz -recordando un aniversario más de la muerte del líder indígena Túpac Katari-, el ejecutivo sindical Jenaro Flores, junto a otros dirigentes, asume la conducción de la Confederación Nacional de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CNTCB), que por la emergente presencia katarista asumiría en ese momento el nombre de CNTCB-Túpac Katari. Éste -según estudiosos del tema- podría considerarse el germen de lo que más tarde y bajo el influjo de las luchas sindicales en Bolivia se organizaría, en 1979, la CSUTCB. Ese año, a convocatoria de la Central Obrera Boliviana (COB) se realizó un congreso de unidad campesina que derivó en la constitución del máximo ente matriz del campesinado.
Sin duda, la figura de Jenaro Flores -que luego fue baleado por agentes paramilitares del ex dictador Luis García Meza- se destaca no sólo como un precursor de la Central Única, sino del pensamiento de Túpac Katari como eje articulador de la acción organizada de los trabajadores del campo.
Por cierto, la génesis de la ‘Única’, como la llaman con cariño sus militantes, que siempre la vieron, más que un simple ente sindical-reivindicativo, como un instrumento de liberación, como la casa mayor que permitía el gran encuentro de hermanos. Decir ‘Única’ significa decir esperanza. Allí se plantaron las bases para proyectar más tarde un verdadero instrumento político propio, que no niegue sino fortalezca la organización sindical.
Entre otros indiscutibles avances para el movimiento campesino, el surgimiento de la CSUTCB puso punto final al denominado Pacto Militar-Campesino que se impuso en la década de los 60 durante el gobierno de René Barrientos y que sirvió para maniatar al campesinado y desde luego para corromper a sus dirigentes. El poder estatal alimentó históricamente la división del movimiento campesino y para ello no dudó en promover organizaciones paralelas sometidas en su momento a la dictadura de Banzer y los posteriores gobiernos neoliberales, incluso en tiempos de democracia.
En el contexto del camino recorrido, no es casual que haya sido el mismo presidente Morales el que haya abierto el XIII Congreso Ordinario de la CSUTCB en la capital, Sucre. Si en algún movimiento social, orgánico y celular funciona a la perfección alguna consigna es precisamente aquella que acuñara el subcomandante Marcos: «Mandar obedeciendo».
Ésa es la lógica en la comunidad, allí no existen liderazgos únicos ni eternos; se rinde cuentas a las bases y se marcha acompañado. Mandar obedeciendo significa fundamentalmente escuchar a las bases y recoger sus pulsaciones. Por ello, tampoco es casual que el mandatario del Estado Plurinacional haya dicho en la apertura: «Si yo manejo o administro, si dirijo mal a Bolivia, nunca más el pueblo boliviano confiará a otro dirigente campesino indígena para que sea Presidente; nuestra tarea debe ser, primero, la unidad granítica de los hermanos campesinos, la unidad de Bolivia…».
Morales ha recordado reiteradas veces los hitos de los movimientos sociales, de sus luchas, de cómo éstos pasaron de la protesta a la propuesta y de la propuesta al poder. Hoy la tarea es llevar adelante una gestión de gobierno que sea la mejor que haya conocido la historia boliviana y no hay lugar a equivocaciones porque éstas sirven para la rearticulación de los sectores opositores al cambio y para alimentar la divisiones que hacen daño movimiento campesino.
El Presidente del Estado ha enfatizado, y con razón, en la necesidad de construir la unidad, que es clave para el futuro del proceso de cambio. El actual proceso de cambio exige organizaciones unidas; más unidad que nunca para encarar los retos para hacer un buen gobierno. Sin duda, el XIII Congreso de la CSUTCB señala el camino adecuado que debe seguir el proceso de transformaciones de aquí en adelante.
Editorial Periodico el Cambio, (Jueves, 29. Abril 2010)
Colombia: Solidaridad con MST Bolivia
Bolivia: Otra vez Sin Tierra
A LA OPINION PÚBLICA NACIONAL E INTERNACIONAL POR EL CONSTANTE ATROPELLO A NUESTRAS COMUNIDADES DEL MST-B
LOS TERRATENIENTES ESTAN GESTANDO OTRO PANANTY Y LAS AUTORIDADES NO DICEN NADA