Nicaragua debe vivir en paz
Informamos a la comunidad internacional y a nuestros amigos de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo CLOC y La Vía Campesina la situación de Nicaragua. Es urgente exigir la paz. Que cese la violencia y la manipulación mediática de las clases dominantes con el apoyo de las fuerzas del imperio.
Desde la Asociación de Trabajadores del Campo (ATC) estamos presentes en el Dialogo Nacional como organización campesina y sindical. Ahí están, además, el gobierno, los partidos de derecha vestidos de sociedad civil y estudiantes opositores y otros grupos representando la economía social, sindicatos y estudiantes legítimamente electos como líderes de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua, todos contando con la mediación de la Conferencia Episcopal de la Iglesia Católica. Este dialogo tiene tres espacios importantes: la justicia, la seguridad social y la democracia. Sin embargo, desde el primer día relegaron la seguridad social a una mesa sectorial y se ha puesto la agenda de la oposición, la democratización, en primer lugar.
El día 22 de mayo se dio a conocer las recomendaciones de la misión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). El Diálogo Nacional votó con unanimidad a hacer suyas las 15 recomendaciones de la CIDH pero no hubo consenso con la propuesta del gobierno de levantar los tranques (bloqueos de vía) que mantienen los grupos armados de derecha a lo largo del país y condenar la violencia “venga de donde venga”. El día 23 de mayo el Diálogo se estancó, ya que la oposición aun no quiso debatir la propuesta del gobierno y demandó discutir una agenda que incluía reformas constituciones, no a la re-elección y elecciones adelantadas antes de levantar los tranques.
Se dio a conocer algunos de los daños que han causado estos tranques, que según el Banco Central ya han resultado en la pérdida de 58,000 empleos. El representante de la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (UPANIC), el sector del agronegocio, hizo claro la posición de su clase cuando dijo en respuesta a la delegada de la ATC que “las pérdidas económicas son un costo que estamos dispuestos a pagar para que Daniel se vaya”, mostrando así su desprecio hacia las clases populares que han sido fuertemente afectados por la incapacidad de sacar sus cosechas, el desabasto de alimentos y la imposibilidad de transportarse hacia sus trabajos.
En once años de gobierno democrático, al igual que algunos países de América Latina, se han logrado muchos avances sociales, culturales, cívicos y económicos. Sin embargo, las fuerzas reaccionarias intentan recuperar espacios políticos y de poder; tienen sed de revancha e intentan desplegar todos los medios posibles para destruir las conquistas y los procesos sociales que hasta ahora se han logrado.
Esa derecha mercenaria no duda incluso de utilizar métodos de violencia organizada para sembrar el caos y promover la desestabilización.
Nicaragua en once años salió de la pobreza, hubo mucha seguridad ciudadana y el país estaba en el proceso de tranquilidad y estabilidad. La crisis del sistema de seguridad social se produjo en parte por una presión que ejerció el Fondo Monetario Internacional (FMI), que exigió medidas extraordinarias de austeridad, las que rechazó el gobierno a favor de una reforma moderada que irónicamente fue utilizada para manipular a la gente diciendo que el gobierno estaba quitando sus pensiones. Ahora esos detalles pierden importancia, ya que las fuerzas de la derecha pro imperialista buscan imponer un cambio de gobierno y no les interesa debatir cómo salvar la seguridad social de los y las nicaragüenses. Su agenda en el diálogo nacional fue ampliamente descrita por el canciller como un -golpe de estado disfrazado de democratización-.
Nos parece importante las declaraciones del señor Luis Almagro, Secretario General de la Organizacion de Estados Americanos (OEA), el 21 de mayo respondió fuertemente a las presiones de la derecha, declarando que: “No vamos a avalar una salida antidemocrática de Daniel Ortega, es un camino que no vamos a avalar, lo siento mucho”. Después produjo un video refiriendo a la campaña de mentiras de “algún sector de la oposición”, sin duda el Movimiento Renovador Sandinista y su ala estudiantil, el M19A. Concluyó que en Nicaragua existe una polarización y es urgente devolverle la decisión al pueblo a través de un proceso electoral transparente, justo y adecuado, lo que es posible sumando sinergias y encontrando soluciones, apoyando un Dialogo Nacional, pero que no se preste al cuadro del golpe de estado blando.
Les informamos que algunas redes sociales, ONG internacionales e incluso analistas que se autodefinen como izquierda se hacen eco del llamado de las fuerzas reaccionarias en Nicaragua, mediante comunicación permanente desdicen la realidad del país, se abogan ser la mayoría del pueblo y los exponentes de la verdad absoluta, como parte de la manipulación mediática llegan hasta provocar que se hagan declaraciones sin tener precedentes de la veracidad de los hechos acaecidos y el sufrimiento del pueblo de Sandino que hoy vive una profunda crisis.
Miles de familias campesinas no pueden trasladar sus alimentos y productos debido a que los políticos extremistas y empresarios han colocado tranques, golpistas manipuladores que destruyen buses, bajan a pasajeros de taxis y siembran el terror con sus caminatas vestidos de azul y blanco impidiendo que más de 45,000 trabajadorxs de las maquilas puedan asistir a sus trabajos, tampoco miles de familias campesinas pueden bajar a la ciudad ni traer productos, ni pueden llevar mercancías para la producción y para el consumo de sus familias.
Un caso inaudito fue una mujer embarazada en Boaco al centro del país se murió porque no dejaron la ambulancia en que se transportaba pasar el tranque, aun cuando ella entró en convulsiones. De igual modo, van acumulando casos de abuso y violencia hacia el pueblo por esos tranques, que por lo general son dirigidos por criminales comunes pagados por los partidos tradicionales de derecha.
Este terror tiene una sola causa: acusar al gobierno de Nicaragua de ser el culpable de toda la crisis para que Daniel Ortega deba salir del país. Aunque en su inicio las protestas eran entendibles y no debieron ser reprimidas, activaron de inmediato una estrategia conspirativa acumulada desde hace varios años para derrocar al gobierno electo. Lo que se olvida es que hay miles de familias campesinas que no están de acuerdo y más bien consideran que debe utilizarse la institucionalidad, que se haga por la vía electoral.
Estamos convencidos que esa fobia por ser presidentes en los grupos reaccionarios de la derecha primero deben pasar por organizarse y realizar elecciones primarias y aun así el sandinismo se mantendrá como una realidad nacional y cuenta con una inmensa mayoría que reconoce el papel organizativo y de buen vivir del gobierno, independientemente que cayo en un error del cual hoy debe castigar a los culpables de la fuerza pública, paramilitares y grupos en conflicto, en especial a la extrema derecha pro imperialista. El dialogo debe llegar a promover que la institucionalidad llegue a un gobierno de mayor amplitud democrática y por supuesto volver a la estabilidad, “Nicaragua debe vivir en paz”.
¡Es urgente organizar la familia nicaragüense y ganar la paz!
¡No al intento golpista disfrazado en la agenda del dialogo nacional!
CLOC – La Vía Campesina.
Managua, Nicaragua 24 de mayo del 2018