En Managua, Nicaragua, la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC) y La Vía Campesina celebraron durante las fechas 22-28 de abril de 2022, una serie de reuniones y actividades en marco de los 30 años desde el nacimiento de La Vía Campesina.
Durante este encuentro, nos sentamos con el compañero Federico Pacheco del Sindicato de Obreros del Campo de Andalucía, miembro del Comité Coordinador Internacional – CCI para la región Europa.
La victoria de llegar a los 30 años de La Vía Campesina
Llegamos en este año a celebrar los 30 años de La Vía Campesina y yo creo que eso ya en sí mismo es una gran victoria. En aquella época que nos propusimos, fue un momento de ataque frontal contra la agricultura dado que ya la Revolución Verde había decretado que el campesinado y la agricultura campesina no era eficaz y tenía que dejar de existir; luego la Organización Mundial del Comercio incluye la alimentación entre sus elementos, reduciendo el alimento a una mercancía.
En ese momento tan duro para la agricultura y el campesinado, surge La Vía Campesina, defendiendo los otros valores y logrando poner sobre la mesa otra realidad, nuestras luchas, pero también otros conceptos que civilizan la existencia del campesinado y la necesidad del campesinado. Comenzamos a hablar de Soberanía Alimentaria y Agroecología Campesina, de Reforma Agraria Integral y de Feminismo Campesino Popular, logrando llegar a este mojón tan importante que fue nuestra Declaración de Derechos Campesinos en dónde condensamos el reconocimiento de nuestra entidad como campesino, como trabajador rural, pescador, pueblo aborigen y nuestros derechos y reivindicaciones para poder realmente alimentar al mundo, contribuir al enfriamiento del planeta, a la paz y a la justicia social.
Entonces en ese sentido las perspectivas son enormes y yo creo que la necesidad de un movimiento como La Vía Campesina está clara, una organización que desde la diversidad más absoluta de nivel de político, religioso, ideológico, estratégico ha sabido tejer esta red cómo horizontal de movimientos campesinos de todo el planeta con esta fuerza, con esta unidad en los principios, en los objetivos es realmente admirable, es una gran victoria no solo del campesinado sino de los movimientos populares. Nuestro desafío es seguir contribuyendo en estos momentos a la paz, a la alimentación frente al hambre y a la crisis alimentaria y al establecimiento de otro modelo social político agrario en que realmente se pueda alimentar a la población, se pueda cuidar al planeta nuestra madre tierra y lograr la paz entre los pueblos.
Los efectos de la pandemia
La pandemia actual como otro fenómeno nos pone delante la globalización en nuestro planeta a todo nivel. Se impulsa la globalización capitalista, a la globalización imperialista con un nuevo sistema de bloques. La Vía Campesina propone siempre la globalización de la de la lucha, de la esperanza, de la construcción desde abajo de la globalización de los pueblos es decir que un sistema en donde podamos defender nuestra soberanía, nuestros derechos, nuestra alimentación, en nuestra cultura y a la vez poder compartirla y en solidaridad poder colaborar unos pueblos con otros.
En este sentido la pandemia ha puesto en evidencia la fragilidad del sistema capitalista, desarrollista, tecnológico que existe, y la importancia y la fortaleza de la producción campesina local, de los sistemas económicos locales y territoriales y debería servir para que eso se visibilice y para que eso se destaque, se valoricen pero sabemos claramente que estamos en una confrontación permanente no es posible la cohabitación de nuestro modelo territorial, agroecológico, local, campesino con la agroindustria y cuál es la respuesta del capitalismo de la agroindustria que siempre se reinventa y aprovecha esta oportunidad es plantearnos querer convencernos de que podemos llegar a nuestra alternativas por medios de mercantilización y del capitalismo de toda la vida entonces nos plantea ese lavado de imagen verde con lo cual da para cuidar la naturaleza.
Las tecnologías que pueden anular al campesinado
Hay que usar este sistema de cuotas de carbono, de mercantilizar, de financiar los recursos naturales con lo cual creemos que es una trampa terrible. El uso de las tecnologías, cuando nosotros estamos pensando en el uso de la tecnología para la actividad campesina, una tecnología que pueda ser manejada y pueda ser controlada por el campesino por los pueblos, por las comunidades. Ellos nos plantean una utilización de la tecnología en qué va a terminar anulando el campesino, reemplazando haciendo la producción cada vez más agroindustrial, erosión en la tierra, que sirven los recursos, que explota a los trabajadores y que haga que los agricultores campesinos pierdan totalmente el control. Todo este tema de la agricultura digital de los drones, de la de la satelización, de las medidas agrícolas y todo esto y conduce hacia eso.
Tenemos que estar muy atentos porque tenemos que reinventarnos permanentemente. Aceptar que en el mundo ya que hay nuevas situaciones y al para la cual tenemos que dar nuevas respuestas. En ese sentido es mantener la mente muy abierta poder experimentar siempre y sobre todo escuchar a nuestra propia juventud que a veces nos trae nuevas ideas, iniciativas, y propuestas que nos van a servir para continuar nuestra lucha y la conquista de nuestros objetivos siempre.