Según datos de la OPS, 1 de cada 3 mujeres han sufrido violencia en algún momento de su vida. Este 25 de noviembre representa un día para visibilizar la lucha de las mujeres contra todas las formas de violencia a nivel global. Desde las organizaciones campesinas, indígenas y negras de la CLOC-Vía Campesinas en Centroamérica, continuamos fortaleciendo la campaña basta de violencia contra las mujeres, misma que ha contribuido a visibilizar y disminuir la violencia en el ámbito rural.
En América Latina y el Caribe (ALC) la población rural representa aproximadamente un 20% de la población de acuerdo a datos del 2021 del Banco Mundial, el porcentaje de la población rural varía entre los países, representando más del 40% de la población total en paíse centroamericanos como Nicaragua, Honduras, Guatemala y Belice y más del 30% en países como Panamá, Ecuador, Bolivia y Paraguay. Las mujeres dedican el triple del tiempo al trabajo doméstico y los cuidados no remunerados en comparación al tiempo que le dedican los hombres. Además, existe una brecha importante entre las mujeres en áreas urbanas y rurales, pues estas últimas dedican de 3 a 10 horas más que las de zonas urbanas.
Para Ana Güezmes, directora de la División de Asuntos de Género de la CEPAL las diferentes crisis que enfrenta la región de América Latina y el Caribe han reforzado los nudos estructurales de la desigualdad de género, creando condiciones desfavorables para las mujeres y limitando su autonomía. Para abordar estas crisis, la CEPAL propone avanzar hacia una sociedad del cuidado que ponga la sostenibilidad de la vida y del planeta al centro. Para lograrlo, es clave la participación significativa de las mujeres, adolescentes y niñas rurales en su diversidad y la garantía de sus derechos.
Las mujeres del campo somos claves en la lucha contra el hambre y en el defensa de la Soberanía Alimentaria, en el cuidado de la biodiversidad, la recuperación de las semillas nativas, el cuidado de las aguas, los suelos y saberes ancestrales. A la vez que somos un frente de lucha, resistencia y resiliencia frente a las crisis política, económica y ambiental. Mediante prácticas agroecológicas garantizamos una gestión sostenible de la madre tierra y fomentamos una economía feminista, solidaria y justa.
Las diferentes formas de violencia que vivimos en el medio rural en Centroamérica, nos obligan a fortalecer la lucha contra este flagelo, mismo que venimos realizando a través de las alianzas con otras organizaciones del campo y la ciudad que nos permiten fortalecer la campaña basta de violencia contra las mujeres. En cada uno de nuestros países las organizaciones campesinas y particularmente las mujeres y las niñas enfrentamos múltiples desafíos como resultado de la violencia ejercida por el sistema machista y patriarcal, nos solidarizamos con los pueblos de la región que hoy día enfrentan la arremetida del sistema capitalista ejercida por parte de los gobiernos como Guatemala y Panamá donde el pueblo mantiene la movilización en las calles en la defensa de la vida y sus territorios.
Demandamos el derecho a vivir en un ambiente saludable, donde decimos un NO rotundo a la mimería y al extractivismos a cielo abierto, luchamos por la soberanía y la autodeterminación de los pueblos en la región.
Rechazamos el genocidio contra el pueblo palestino, donde las mujeres y las niñas se encuentran en condición de vulnerabilidad. Exigimos el cese a las hostilidades contra este hermano pueblo que lucha por su territorio, condenamos las acciones criminales de Israel.
Exigimos el cese a los asesinatos de mujeres en el medio rural, mujeres que alzan su voz contra el despojo de sus territorios y los bienes comunes, denunciamos las desapariciones forzosas, los femicidios y la
criminalización de la lucha campesina.
Demandamos la ejecución responsable del plan acordados por la FAO, ONU Mujeres y UNFPA para avanzar los derechos de las mujeres rurales en América Latina y el Caribe que se centra en la incidencia política y normativa de alto nivel para acelerar la reducción de la brecha de género en el acceso a los recursos productivos; y la cobertura rural de los servicios de cuidados, salud sexual y reproductiva y la violencia basada en género.
Centroamérica 25 de noviembre 2023