1 de abril de 2016
1. En el marco de los 20 años de la firma de los Acuerdos de Paz firme y duradera, firmado el 29 de Diciembre de 1996 entre el Gobierno, la URNG y el Ejercito con la mediación de las Naciones Unidas y de la Firma del Acuerdo de Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas firmado el 31 de marzo de 1995 en la ciudad de México Distrito Federal, hermano país que formó parte de los amigos del proceso de Paz en Guatemala, junto a otros países como Noruega, Suecia, Bélgica, Colombia, Venezuela, entre otros, junto al esfuerzo y participación de innumerables y diferentes sectores sociales, como las mujeres mayas, sobrevivientes del Genocidio, las viudas, desplazados, refugiadas, retornados, cristianos, campesinos, sindicatos, estudiantes, académicos, los partidos políticos, autoridades ancestrales, lideresas locales, regionales y a nivel nacional.
2. Los pueblos mayas fuimos los más afectados durante los más de 37 años del Conflicto Armado Interno que dejo como resultado el genocidio de los años ’80 contra el pueblo Maya Achí, Ixil, Quiché y otros, dejando un holocausto en las comunidades indígenas donde tenemos más de 50,000 desaparecidos, miles de familias desplazadas, miles de mujeres viudas, huérfanos, refugiados y retornados, comunidades en resistencia, frente al despojo de la vida, la tierra, el agua y todos los bienes naturales, las masacres, la tortura y la desaparición forzada.
3. A 21 años de la Firma del Acuerdo de Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas han pasado 5 periodos de gobierno pero ninguno de ellos ha priorizado el cumplimiento o desarrollo de una política pública para dar cumplimiento al acuerdo relacionado a los Pueblos Indígenas (Mayas, Xincas y Garifonas), en ese entonces estábamos consientes que, el camino de los Pueblos Indígenas para que fuera respetado, reconocido, aceptado con nuestra visión, valores, principios, practicas y saberes ancestrales era difícil y de largo camino, porque el racismo, la exclusión y el Estado Mono cultural que vivimos, no será fácil cambiar, pero es un reto lograr la construcción de un país pluricultural, multilingüe y multiétnico porque hoy en día conocemos nuestros derechos, la ejercemos y defendemos constantemente, a pesar de la criminalización de las luchas y el papel de los liderazgos.
4. El racismo estructural, ideológico e histórico que sufrimos los Pueblos Indígenas, así como el actuar de los políticos tradicionales que no ceden espacio para las mujeres y los Pueblos Indigenas en la participación y toma de decisión en los puestos públicos, no existe el reconocimiento de la educación oral y la administración de justicia desde las autoridades ancestrales, los conocimientos medicinales y los servicios comunitarios que tenemos los Pueblos Originarios.
5. Conavigua exhorta a los Pueblos Indigenas, Mayas, Xincas y Garifonas a buscar espacios de diálogo para que dentro de los poderes del Estado se cumpla lo que establece el Acuerdo de Identidad y Derechos de los Pueblos Indigenas, este acuerdo sigue vigente y es nuestro instrumento de lucha, junto a los convenios y tratados internacionales que avala los derechos ancestrales de la tierra, territorio, agua, bosques, semillas, los saberes que tenemos en sus distintas expresiones que por nuestra historia de opresión, exclusión y racismo no han sido valorados.
6. Animamos a todas las organizaciones, redes e instancias a seguir defendiendo nuestros derechos como Pueblos, a las comunidades y autoridades ancestrales a mantener la resistencia y defensa de los derechos que como Pueblos nos corresponde. Saludamos y animamos de manera especial la resistencia de las comunidades de la Puya por la lucha que han mantenido en defensa de la tierra y sus bienes naturales, así como la lucha de los Pueblos Q’anjob’al, Mam, K’iche, Ixil y Q’eqchi’, que su lucha guie nuestro camino de verdad, justicia y resistencia frente a la extracción minera y los mega proyectos que están afectando al salud, la tierra y los animales en nuestras comunidades.
7. A las organizaciones de Mujeres seguir profundizando nuestros derechos y teniendo claridad que el opresor político, económicos, militar, el machismo y racismo son sistemas que han generado genocidio y ecocidio en la historia de nuestros pueblos.
8. Por lo que es necesario avanzar en la defensa de nuestros derechos específicos que a diario y con distintos gobiernos han sido violados, sin importar que Guatemala es signataria de convenciones sobre los derechos de las Mujeres, los Pueblos Indígenas, Derechos Humanos, Paz y Seguridad para las Mujeres, el Medio Ambiente y la Soberanía Alimentaria, entre otros.
9. Este 31 de marzo, alzamos nuestra voz de condena ante la decisión tomada por el Presidente Jimmy Morales de no respetar el Acuerdo de Identidad de Derecho de los Pueblos Indígenas y de violentar los procedimientos y mecanismos de elección y nombramiento de la Defensora de la Mujer Indígena, el Ejecutivo una vez más ignora el trabajo de las organizaciones de Mujeres Indígenas, y por lo tanto se aleja de lo que establecen los Acuerdos de Paz.
Por la verdad, la justicia y reparación de los hechos del Conflicto Armado Interno y el cumplimiento de los Acuerdos de Paz y el Acuerdo de Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas.
Conavigua, presente!
Ciudad de Guatemala, 31 de marzo de 2016.