Este 25 de noviembre, día internacional de la Lucha Contra la Violencia hacia las mujeres, desde la Articulación de Mujeres de la CLOC- Vía Campesina en Centroamérica, una vez más alzamos nuestras voces para rechazar la violencia contra las mujeres a nivel general y particularmente de pueblos originarias, afrodescendiente y campesinas que se ha convertido en verdadero flagelo que discrimina y atenta contra nuestras vidas sin importar la clase social, credo político, religión y edad.
Con mucha indignación y rabia vemos cómo los abusos y femicidios se recrudecen en millones de mujeres en todo el mundo las que mueren a causa de la violencia en sus distintas expresiones tales como agresiones, amenazas, daños por la discriminación de género, sexismo, acosos, desplazamientos, encarcelamiento, femicidio y criminalización de la lucha campesina, que limita el acceso de las mujeres a la tierra y el territorio, así como a los recursos naturales y económicos.
Cada año 66.000 mujeres mueren en el mundo a causa de los femicidios y de la violencia sistémica, uno de los lugares donde esto ocurre con más frecuencia es Guatemala, que tiene una de las tasas más altas de femicidios del mundo, de enero a octubre de 2017 el Ministerio Público recibió 51 mil 742 denuncias de violencia contra la mujer, le siguen el Salvador y Jamaica. Los principales asesinatos se dan a miles de mujeres y niñas de los pueblos originarios. Además, las empresas hidroeléctricas y mineras en las comunidades indígenas son responsables de desalojos violentos y violaciones de niñas y mujeres. En el Salvador, la violencia contra las mujeres ha aumentado un 197% macabro porcentaje que convierte al país centroamericano en una de las naciones con altas tasas de femicidio.
Honduras ocupa el primer lugar en femicidios en el área Centroamericana, superando a Guatemala ya que los últimos días esta ola de violencia ha ido en alza. Según el Observatorio de la Violencia de la UNAH de enero a marzo del presente año, 99 mujeres fueron asesinadas, 73 de ellas entre 15 y 39 años de edad. En la última semana de junio, la violencia segó la vida de 18 mujeres. A todas ellas no las mató un agresor, fueron víctimas de un Estado indolente. Desde el 2015 más de 1700 mujeres han sido procesadas y 10 mujeres fueron asesinadas en la lucha por el acceso a la tierra, los casos de Berta Cáceres y Margarita Murillo son los más emblemáticos. Cada 14 horas se asesina una mujer en Honduras, ese dato escalofriante lo proporciona el Movimiento de Mujeres por la Paz, Visitación Padilla, en lo que va del 2017 son 140 mujeres asesinadas.
En este año en Nicaragua 30 de 48 mujeres muertas por violencia de género tenían entre 14 y 34 años, en 15 de estos casos los actores principales están prófugos. El mes más violento ha sido agosto, en el que se registraron ocho femicidios en 25 días, la lista de agresores la encabezan las parejas con 13 casos.
En Costa Rica 25 mujeres han perdido la vida a manos de sus parejas y ex parejas, los femicidios suman en promedio tres víctimas mensuales.
En Panamá de enero a octubre del 2017 han ocurrido 37 femicidios causados por las parejas de las mujeres y dos muertes por desalojos violentos. Panamá registró por violencia intrafamiliar 17 mil denuncias en 2016.
Este 25 de noviembre hacemos un llamado global a las organizaciones de la CLOC-LVC en Centroamérica, así como a organizaciones aliadas y amigas para que trabajemos en un frente común para luchar contra todo tipo de violencia hacia las mujeres sin importar su origen y descendencia. Nos sumamos firmemente a los 16 días de activismo contra la violencia de género establecidos por la ONU.
Centroamérica 24 de noviembre 2017
LA VÍA CAMPESINA DICE NI UNA MENOS
¡BASTA DE VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES!
¡POR NUESTRAS MUERTAS NI UN MINUTO DE SILENCIO, TODA UNA VIDA DE LUCHA!
¡GLOBALICEMOS LA LUCHA, GLOBALICEMOS LA ESPERANZA!