Llamamiento a los pueblos de Nuestra América
Decimos NO al TLC MERCOSUR – UNION EUROPEA: Nuestra América es posible y necesaria
En las últimas semanas, fuentes no oficiales dejaron trascender que en ocasión de la realización de la XI Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio -que se realizará en la segunda semana de diciembre en la ciudad de Buenos Aires-, se anunciará la conclusión de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre la Unión Europea y el Mercosur. Estas negociaciones se iniciaron a principios de los 2000 y fueron revitalizadas y aceleradas en los últimos dos años, en el contexto de los nuevos gobiernos de orientación neoliberal en Argentina y Brasil.
Hace 12 años, trabajadores del campo y la ciudad, indigenas, afrodescendientes, excluidos de los barrios populares, artesanos y la diversidad de actores que componemos los movimientos populares y los pueblos de Nuestra América dijimos no al Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA) y a sus consecuencias: la subordinación a la hegemonía estadounidense y la profundización de las transformaciones neoliberales.
Hoy levantamos nuestra voz y nuestra acción frente a las intenciones de consagrar un nuevo acuerdo de libre comercio, esta vez con la Unión Europea, al igual que expresamos nuestro rechazo a las políticas que impulsan las trasnacionales en la OMC. En ambos casos, las corporaciones privadas buscan afectar la soberanía para saquear nuestros territorios y “abaratar el costo de la mano de obra”, que es una forma de decirle a la pérdida de los derechos laborales y al empeoramiento en ña calidad de vida.
Tenemos razones sustantivas para rechazar este acuerdo:
Su negociación se ha llevado en secreto, a espaldas de los pueblos e incluso de los propios parlamentarios de los países involucrados. Su aprobación afectará las legislaciones vigentes y los derechos consagrados.
Lo poco que ha trascendido de la negociación indica que, al iguao que otros TLC, la liberalización comercial afectará la estructura industrial, el empleo y el desarrollo científico tecnológico de nuestros países, profundizando la desindustrialización, el desempleo, la pauperización y la dependencia tecnológico productiva.
La apertura de las compras estatales y la liberalización de los servicios tenderá a profundizar el desmantelamiento y privatización del sector público, en particular en el terreno de la educación y en el de la salud, en consonancia con las políticas que están promoviendo los gobiernos de Argentina y de Brasil.
Los capítulos de patentes y de comercio electrónico que han trascendido del acuerdo significarán consagrar la transferencia de la innovación científico tecnológica y de actividad económica del Sur al Norte.
La apertura comercial y de inversiones a la Union Europea debilitará definitivamente los logros, aún relativos, alcanzados por el MERCOSUR y los proyectos de una efectiva y alternativa integración nuestraamericana.
En síntesis, estos acuerdos de libre comercio e inversiones entre países del Sur con los centros del capitalismo desarrollado vienen a profundizar y a recrear la subordinación socioeconómica de nuestros pueblos y los viejos pactos coloniales y dependendientes.
Impulsamos la integración económica sobre la base del respeto a la soberanía y la promoción de los derechos económicos, sociales y culturales de los pueblos de Nuestra América.
Por eso, rechazamos el TLC MERCOSUR – UE y llamamos a los organizaciones populares a sumarse a este llamamiento.