Mujeres con historia, con sensaciones, con luchas, con esperanzas, con desafíos, con propuestas y con memoria
El campo nos acoge en su seno más profundo, nos germina, nos sazona, nos permite exponer ideas, pensamientos, extender nuestras ramas para ayudar a construir un mundo rural mejor.
Compartimos con vosotras y vosotros «algo de nuestro sentir y de nuestro vivir»
La discriminación de género y la invisibilidad social que las mujeres rurales sufrimos en nuestra vida diaria siguen siendo dos de los principales obstáculos para que el desarrollo social y económico llegue al medio rural. Reconocemos y somos concientes que hemos avanzado, pero aún queda un gran camino para recorrer
Nuestro campo se va despoblando terrón por terrón, por dispersión geográfica, con alto grado de envejecimiento, juntas y juntos debemos pensar como revertimos esta situación. Pensamos que :limando las dificultades en el acceso a las viviendas, mejorando la caminería, por un tema de violencia que nos mantiene al margen de los distintos planes elaborados, por un patriarcado que no nos abandona, por una autonomía económica que ayudaría en la prevención de la violencia en el campo, y como objetivo principal, aspiramos se nos garantice un medio ambiente y agua libre de agrotóxicos y contaminantes .
Las mujeres y los/las jóvenes rurales jugamos un papel fundamental en la construcción de un nuevo modelo social, sustentable y sostenible en el campo. Por citar ejemplos nuestra incidencia en el nuevo decreto de co- titularidad que a fines del 2014 se aprueba por unanimidad en el Instituto Nacional de Colonización
Pensamos que el diseño de estrategias de desarrollo rural sostenible tiene que incorporar a las mujeres y a los/las jóvenes para que dichas estrategias planificadas desde y para el territorio contribuyan a consolidar dicho modelo, como políticas nacionales y departamentales. Se planifica con vivencias, con aportes de quienes vivimos y sentimos el campo como nuestro, con sus fortalezas, limitaciones y dificultades para permanecer en él
Se hace muy necesario el desarrollo de jornadas informativas y de foros de debate que permitan hacer un análisis de la situación real de la mujer en el medio rural, de los recursos existentes y de su aprovechamiento. Sólo así, conociendo la realidad social de la que partimos, podremos construir alternativas económicas y sociales, reales y de continuidad.
Las acciones de sensibilización, motivación y formación para las mujeres del medio rural favorecerán que nosotras mejoremos en nuestra autoestima.
Seremos capaces de tomar las riendas de nuestras vidas, porque somos y lo sabemos, sujetos de derecho, capaces de emponderarnos, creando nuevas iniciativas de autoempleo, siendo parte de las cadenas de valor en que nos sentimos inmersas o mejorando las perspectivas de entrar en el mercado laboral.
Conociendo la realidad económica y social en que las mujeres y los y las jóvenes vivimos en el medio rural en nuestro país, podremos poner las simientes sobre las que construir un futuro más justo y sostenible en el tiempo.
Ojalá que hayamos contribuido a esa construcción desde nuestro pensamiento
Reunión ampliada de delegadas de la RED de Grupos de Mujeres Rurales del Uruguay
Centro Agustín Ferreiro
06 de marzo de 2015