29 de marzo de 2013
Advirtieron sobre fraude en las próximas elecciones en Honduras
El movimiento Vía Campesina destacó que desde el golpe de estado del 2009 creció en Honduras «la criminalización» de los campesinos y otros sectores, y advirtió que el gobernante Partido Nacional hará fraude.
«Desde el golpe de estado (del 28 de junio de 2009, contra el presidente Manuel Zelaya) se ha vuelto más progresiva la criminalización (de la protesta social) contra los campesinos y otros sectores», señaló a Télam Malitzin Chávez, representante de Vía Campesina de Honduras.
La dirigente agregó que «para los poderosos del Partido Nacional y Liberal, eso no es problema», porque «más bien consideran que los que estropean el proceso en el Bajo Aguán y otras partes del país son los campesinos, no los empresarios con sus ideas neoliberales de que los ricos son los que deben tener el poder».
Honduras tiene los mayores índices de homicidios del mundo, según estadísticas de Naciones Unidas, con 92 asesinados cada 100.000 habitantes, y no dejaron de crecer en los últimos años.
Para la dirigente de la organización que integra el mayor movimiento campesino de América latina, en las elecciones presidenciales participarán «los partidos tradicionales, el Liberal y el Nacional, y el nuevo Partido Libre, con otro tipo de pensamiento».
«Libre, que lleva a Xiomara Castro (la esposa de Zelaya) como candidata presidencial, cuando gane piensa revertir esta postura contra los campesinos y darles el lugar que les corresponde en la economía del país», afirmó la representante de Vía Campesina, cuyo secretario general, Rafael Alegría, es candidato a diputado por el Partido Libre.
Aseguró, además, que «en las elecciones internas del año pasado en el Partido Nacional, y con su candidato Juan Orlando Hernández, sí se comprobó que hubo fraude».
«En las elecciones internas del año pasado en el Partido Nacional sí se comprobó que hubo fraude»
Malitzin Chávez
Chávez mencionó que uno de esos mecanismos para «manipular a los electores» fue «facilitarles cédulas de identidad para poder votar a cambio de hacerlo por él dentro de su partido», además de «entregar a las comunidades arroz y frijoles; es decir, aprovecharse de la necesidad de la gente para conseguir votos».
Hernández, actual presidente del Congreso unicameral de Honduras, es, a su juicio, «el hombre más poderoso del país, porque tiene influencia en muchas instituciones, tanto privadas como públicas».
«Sí considero, entonces, que va a haber fraude electoral; sí lo intentará el Partido Nacional, porque ya lo ha demostrado en oportunidades anteriores», dijo la dirigente.
En cuanto al Partido Liberal, Chávez destacó que «se dividió totalmente» porque al presidente Zelaya el golpe de estado «se lo dio uno de su mismo partido, (Roberto) Micheletti».
Precisó luego que una parte de ese partido se sumó a Libre, pero reconoció que «el actual candidato liberal (a la presidencia), Mauricio Villeda, logró recuperar varios sectores otra vez», los que se quedaron junto a la candidata Castro, a su juicio, «son los más conscientes de lo que pasó y tienen clara su ideología».
Respecto del agudo conflicto entre campesinos y terratenientes del Bajo Aguán, la dirigente recordó «que desde el golpe hasta ahora hubo 91 campesinos asesinados».
Señaló que en los `70, bajo el mandato del presidente liberal Ramón Villeda Morales, padre del actual candidato, «hubo una ley de reforma agraria», que en los `90, «al tomar el poder el Partido Nacional con Rafael Leonardo Callejas, la cambió con otra llamada de Modernización Agraria, que permitía el latifundio».
«Esto fue aprovechado por empresarios nacional y extranjeros, y el que más acumuló tierras fue Miguel Facussé», dijo la representante de Vía Campesina.
Agregó, sin embargo, que el terrateniente «logró obtener las tierras bajo amenazas, manipulación y sobornos a los campesinos», los que hace unos seis años volvieron a organizarse en el Movimiento Unificado de Campesinos del Aguán (MUCA), y reclamaron sus propiedades, demostrando que «hubo manipulación para que Facussé obtuviera sus tierras».
Chávez también recordó que hace dos años se instaló en el Bajo Aguán un comando militar, «pero no mejoró la seguridad, sino que se incrementó el número de campesinos muertos», y aseguró que «se trata de asesinatos selectivos, porque son líderes los que buscan y los referentes son amenazados permanentemente».