18 de Junio de 2014
Empresario Balduzzi, se reconoce culpable en Tribunales de Cruz del Eje y propone pagar daño a campesinos que lucharon 12 años por sus tierras.
El 18 de junio nos reunimos compañeros y compañeras el movimiento campesino de la Provincia de Córdoba, para acompañar a la familia Ozan y a todas las familias campesinas que viven y trabajan en el paraje rural de San Antonio en el inicio del juicio al empresario Casimiro Bautista Balduzzi por usurpación y turbación de la posesión de las familias campesinas. El juicio no arrancó porque el acusado Balduzzi antepuso una suspensión del juicio a prueba, conocido como probation, declarándose así, culpable de los hechos que se los acusan. Evidentemente el empresario no quiso enfrentar las contundentes verdades de la familia Ozan, demostrando miedo frente a la fortaleza de Lidia Ozan, de su familia, de su comunidad, de la justicia.
Casimiro Balduzzi amparado en su impunidad ofrece a la justicia resarcir sus delitos devolviendo 28 hectáreas y rehacer el pozo de agua que tapo obligando a la familia Ozan a tener que comprar agua para poder seguir viviendo en su campo. Es decir el acusado quiere pagar su pena con tierra que usurpó. Los daños que él ha generado podríamos sintetizarlos en destrucción de pozos de agua y represas, imposibilidad de desarrollar la producción familiar, gestiones y trámites de las familias, usufructo del bosque de la familia Ozan y la lista sigue. Hablamos de daños que en términos monetarios superan ampliamente los $ 500.000, suponiendo que un psicólogo estatal gratuito pudiese reparar las secuelas del sufrimiento.
A pesar de las amenazas que excediendo lo vrebal empuñaba armas, de las topadoras, de la complicidad de la policía que custodió un hecho delictivo, de los oídos sordos en las comisarías la familia Ozan y todas las familias campesinas de san Antonio seguimos viviendo y produciendo alimentos sanos en nuestro campo. Celebramos que este empresario se haya declarado culpable, que haya temido dar la cara y enfrentar tanta dignidad campesina, nos deja con más ganas de luchar por lo que sigue. Nos volvemos a nuestra casa a seguir trabajando, produciendo y con la fortaleza de que seguiremos defendiendo lo que es nuestro hasta las últimas consecuencias.-