Las organizaciones que conforman la Plataforma Agraria integradas por la campaña Vamos al Grano y La Alianza por La Soberanía Alimentaria y Reforma Agraria (SARA), ante los últimos hechos sangrientos suscitados en el Bajo Aguán, manifestamos nuestra preocupación, condena y repudio a los recientes actos de violencia, donde 11 hondureñas y hondureños han perdido la vida y unas 15 personas han resultados gravemente heridas.
Estos hechos violentos vienen a demostrar una vez mas que hay una excesiva cantidad de tierra concentrada en unos pocos, provocando una conflictividad agraria aguda, donde hasta el día de hoy han sido desfavorecidas las mayorías pobres (campesinos y campesinas), contradiciendo los principios de justicia social que el Estado tiene la obligación de promover.
No es con acuerdos faltos de voluntad ni compromiso que se encontrarán soluciones a la problemática agraria en honduras. Los cambios en el agro deben ser integrales e incluyentes con el fin de lograr una verdadera transformación agraria integral en el país, que garantice la paz y la reconciliación entre los actores y permita el acceso a la tierra para la producción, la alimentación digna y el desarrollo del campesinado y por ende contribuya a erradicar la pobreza y contribuir a la paz.
Hacemos un llamado al Estado, al sector privado y a los movimientos campesinos de la zona del Bajo Aguán y de todo el país para que abran el diálogo y promuevan acciones comprometidas con miras a resolver el problema del agro, ya que no es a través de desalojos ni acciones violentas ni tampoco con el derramamiento de sangre campesina, ni mucho menos con la militarización que se contribuirá a una solución pacífica de estos conflictos. Por el contrario, ya hemos visto anteriormente, que las acciones de carácter coercitivo y represivo, sólo contribuyen a aumentar la intimidación, la represión, las violaciones de derechos humanos y a sembrar el terror en la población y sobre todo los sectores más desposeídos del país.
Expresamos nuestro repudio y condena a los actos de violencia que siguen cobrando la vida de valiosos hondureños y hondureñas en su lucha por tener un pedazo de tierra para producir sus alimentos, así mismo hacemos un llamado a no personalizar ni desviar la atención de las verdaderas raíces del conflicto hacia personas en particular, grupos o instituciones que históricamente han luchado y apoyado decididamente a los excluidos y marginados de este modelo de desarrollo económico impuesto en Honduras.
Rechazamos la decisión del ministro de seguridad de militarizar la zona, sabemos que esta no es la solución a la problemática agraria, la pretensión no es cuidar a las y los campesinos, sino intimidar y sembrar el terror y la zozobra en el aguan y con los últimos hechos se tiene la excusa perfecta para hacerlo, pero además no descartamos que se olviden también de los acuerdos firmados entre el gobierno, los terratenientes y los movimientos campesinos del aguan hace algunos días y ponerle fin a toda esta barbarie que viven nuestras compañeras y compañeros.
PORQUE LA TIERRA NOS PERTENECE, LUCHAREMOS HASTA EL FINAL
TRANSFORMACIÓN AGRARIA INTEGRAL ¡YA!
PLATAFORMA AGRARIA
Tegucigalpa 17 de Agosto de 2011