22 de agosto de 2013
El Paro es incontenible a pesar de la represión oficial e intentos de dividir negociando por separado.
Unos 200 mil campesinos, transportadores y mineros movilizados, 50 mil camiones paralizados en 27 departamentos, más de 30 vías bloqueadas, un muerto, 50 heridos, 100 detenidos y con la posibilidad que los Indígenas del Cauca y los campesinos de la región del Catatumbo se sumen en las próximas horas a la protesta, es el balance que se presenta en Colombia durante el cuarto día del paro agro-minero, de transportadores y de sectores sociales como la salud.
Al menos siete sectores conectados con la agricultura participan en el paro nacional que comenzó este lunes, al cual se sumaron los transportadores de carga, profesores y trabajadores dedicados a la pequeña minería, a la protesta se unieron los cultivadores de café, cacao, algodón, papa, arroz y maíz entre otros. Además de los productores de lácteos, quienes piden apoyo oficial para superar la crisis social en este país suramericano.
La situación de ataques de la fuerza pública colombiana y sus instituciones, contra los manifestantes en estado de indefensión, es tan descarada, brutal, de conducta delictiva y violatoria de los dd hh, que las Fuerzas armadas, disparan desde los helicópteros, incendian propiedades de los campesinos como los registrados en el Norte del Departamento del Cauca, Corregimiento de El Cairo, Municipio de Cajibio. El Instituto de Bienestar Familiar ha amenazado a los campesinos padres de familia con niños, de quitarles la patria potestad porque están con sus hijos en las protestas como ocurrió el 20 de agosto cerca a Barrancabermeja, punto conocido como Expoeventos y hasta los productos agrícolas como yuca, plátano, banano, etc cultivados por los propios campesinos son robados de frente y por la fuerza por parte de la policía colombiana bajo el argumento que deben ser decomisados en la protesta.
Eberto Díaz, Presidente de la Federación Sindical Unitaria Agropecuaria. FENSUAGRO y dirigente de La Mesa de Interlocución y Acuerdo Nacional del sector agrario y popular en diálogo para los medios de comunicación Europeos, dijo:»El paro agrario, minero, de transportadores y la salud, viene sumando una importante fuerza social y se ha convertido en incontenible ya que a pesar de la fuerte militarización y represión que ha habido en todas las regiones de Colombia con el ejército y la policía a través del ESMAD, los campesinos han logrado sobrepasar esas barreras y podemos decir que hay más de doscientos mil labriegos apostados a los lados de las vías, otros con taponamientos en las carreteras, a los que se han sumado más de 50 mil camioneros que han parado voluntariamente, en este sentido, el paro contrariamente a lo que decía el gobierno que la movilización sería insignificante, sin importancia y lo desconoció desde el momento en que radicamos el pliego de exigencias, no se le vio, ni dio la voluntad de dialogar y hoy los campesinos siguen allí en este cuarto día y todo deja ver que la protesta continuará indefinidamente a pesar de la represión»
Indicó el dirigente agrario que «desde los helicópteros del ejército y la policía vienen disparando gases y balas contra los manifestantes, lo que ha dejado como resultado un motociclista asesinado en Boyacá, el cual fue impactado en el pecho por un artefacto que contenía gases lacrimógenos cuando este transitaba por la vía en una moto, hay más de cincuenta heridos algunos de gravedad y cien detenidos, con lo cual se demuestra que el estado colombiano está desconociendo el derecho constitucional a las libertades de movilización, expresión, organización etc y es el único responsable de los enfrentamientos que ha habido por la provocación de la fuerza pública y agresión de estos contra los manifestantes».
La protesta que se origina por la negativa del gobierno nacional de establecer un escenario de diálogo con las organizaciones sociales que permitan superar la grave crisis que afronta el campo colombiano producto de la aprobación e implementación de los tratados de libre comercio TLC, la altísima e ilegal concentración de la tierra, el desconocimiento de los derechos políticos del campesinado, los atropellos de la fuerza pública y el desarrollo de una política minero energética que favorece a grandes multinacionales en contravía de nuestra naturaleza y de las comunidades rurales, lo que tiene empobrecido el campo por encima del 70% el campesinado han llevado a los sectores agrarios, de trabajadores de la salud y transportadores a desarrollar el paro nacional agrario y popular que comenzó el 19 de agosto.
A pesar del despeje realizado por la fuerza pública en algunas vías de Colombia, en regiones como Boyacá, Caldas, Risaralda, Meta, Arauca, Cauca, Caquetá, Huila, Nariño, en Ituango, Antioquia, los Santanderes, en Cundinamarca, la vía a Villavicencio entre otras, heroicamente campesinas y campesinos mantienen muchos bloqueos y es donde más fuertemente se siente el paro. Pero en general hay una tensa situación debido a los enfrentamientos que hay con el ejército y el Esmad, ya que es la única forma de hacerse escuchar los campesinos, es bloqueando las vías, confirmó Eberto Díaz dirigente de Fensuagro, el cual reveló que en distintas ciudades del país numerosos grupos de estudiantes especialmente de las universidades Nacional y Distrital en Bogotá y Santander han realizado actos de protesta en solidaridad con los campesinos y el paro agrario, al igual que otros sectores sociales colombianos.
El dirigente dijo que: «si el paro sigue y se demora es culpa del gobierno, del estado y sus instituciones que no prestan atención a los campesinos y las organizaciones que han convocado este paro indefinido y hoy jueves vamos a procurar dialogar con algunos parlamentarios a fin de buscar abrir las puertas del gobierno al diálogo nacional y de negociación ya que nosotros estamos dispuestos pero no el estado, quien persiste en que se hagan mesas departamentales para seguir cubriendo los graves problemas del campo con agua tibia y nosotros decimos que el problema es estructural y como tal hay que darle soluciones de inmediato poniendo en marcha políticas efectivas dirigidas a solucionar la crisis del campo y la propiedad de la tierra, donde más de un millón de familias campesinas no posee la propiedad de la misma, el reconocimiento de las Zonas de Reservas Campesinas que es la ley 160/94, la ampliación de los resguardos indígenas, territorios afrodesendientes, y territorios interétnicos o plurietnicos y que permita a la sociedad rural vivir articuladamente, que los derechos campesinos aprobados por la ONU el año anterior se pongan en vigencia e igualmente la inversión social en agua, educación, salud, vivienda, servicios básicos etc. .
Eberto Díaz de la Mesa de Interlocución y Acuerdo Nacional del sector agrario y popular, MIA, dijo que como la lucha social en Colombia es muy dinámica, los indígenas del Cauca han dicho que si en las próximas horas no se atiende la protesta campesina, ellos los indígenas entraran también a apoyar la protesta, hecho que es muy interesante debido a lo importante que significa el movimiento indígena en el país e igualmente se ha conocido por parte de los campesinos y sectores sociales del Catatumbo que están dispuestos a regresar a las protestas y sumarse al paro»
Respecto a la solidaridad internacional especialmente europea Eberto Díaz dijo que «se necesita en forma urgente que los gobiernos amigos exijan al gobierno colombiano sentarse a dialogar en una mesa de carácter nacional con las organizaciones que hemos convocado este paro social, y a las organizaciones hermanas dirigirse a las embajadas de Colombia con el pliego que hemos presentado a través de la MIA, exigiendo un pronto diálogo con los manifestantes, escribir a la presidencia de Colombia exigiendo el dialogo y no la represión contra los manifestantes, es hora de que internacionalmente nos apoyen desde todas partes del mundo»
El dirigente de Fensuagro, dijo que han sido tantos los atropellos y violaciones de los DDHH que han creado una comisión en tal sentido la cual está trabajando con miras a presentar las respectivas denuncias internacionales ante la ONU y las distintas oficinas de DDHH en Ginebra, Suiza, y la OMCT, a fin de mostrar como están siendo violados los DDHH por parte de la fuerza pública, la cual ataca viviendas y sitios donde hay niños, mujeres embarazadas, minusválidos sin que estos estén en las manifestaciones, de todas formas están sufriendo la represión del estado colombiano.
«Desde la MIA de nuevo hacemos un llamado al gobierno nacional para que detenga las violaciones a los derechos humanos que se vienen presentando en todo el país. Se está disparado a los manifestantes con balas de fusil, se retienen buses ilegalmente, se empadrona a comunidades enteras por parte del ejercito, le reiteramos al presidente Santos, que estamos en disposición de establecer lo más pronto posible un escenario de dialogo con nuestros voceros para abordar los seis puntos de nuestro pliego nacional buscando diversas fórmulas que permitan llegar a acuerdos y superar la grave crisis que afectan nuestro país», reiteró Eberto Diaz.
A su turno Juan Carlos Quintero, vocero de la Asociación de Campesinos del Catatumbo (Ascamcat), amenazó con la posibilidad de que retomen su paro. El dirigente dijo que de continuar las erradicaciones de cultivos ilícitos que se vienen realizando en las zonas rurales de la región, lo labriegos se unirían al paro agrario nacional. El Catatumbo fue escenario de un violento paro de varias semanas que dejo varios campesinos asesinados por la fuerza pública, un centenar de heridos y detenidos y obligó al gobierno a sentarse a negociar.