Como parte de nuestra cobertura colaborativa en marco del VIII Congreso Continental de la CLOC-Vía Campesina, el equipo de comunicación está realizando entrevistas con representantes del movimiento. En nuestra tercera entrevista, Celina Maciel de la Red Nacional de Semillas Nativas y Criollas de Uruguay entrevista a Magha García de la Organización Boricua de Agricultura Ecológica y la Articulación de Mujeres de la región Caribe sobre la realización de la VII Asamblea Continental de Mujeres de la CLOC-Vía Campesina.
Celina: Seguimos en los días previos al comienzo del VIII Congreso de la CLOC Vía Campesina. Estamos en la Ciudad de México, en la Utopia Estrella en Iztapalapa, y estamos con Magha García de la organización Boricua de Puerto Rico, que representa de la región Caribe dentro de la Articulación de Mujeres de la CLOC-Vía Campesina. Magha, queremos preguntarte varias cosas pero dentro de ellas, que nos cuentas cómo ha evolucionado la participación de las mujeres dentro de la CLOC desde de su creación?.
Magha: El desarrollo y desempeño de la de la Articulación de Mujeres abrió un camino que es el que nosotras ahora estamos recorriendo. Hoy tuvimos la oportunidad de ver a una de nuestras mujeres históricas, a Francisca (La Pancha), una mujer de fuerza brillante que está viendo al futuro. Desde el trabajo que hacen las mujeres dentro de su articulación han podido identificar, con antelación, como si fueran profecía, lo que iba a pasar.
Tenemos que organizarnos, tenemos que accionar, porque tarde o temprano eso se va a manifestar. En los años que yo llevo en la CLOC he podido ver ese trabajo histórico, una agenda de trabajo permanente, que se modifica, que se adapta, que es flexible. Esto es parte del trabajo histórico. Es el legado que nos dejaron quienes nos antecedieron. Y creo que en estos momentos quienes estamos caminando tras esas mujeres tenemos una gran responsabilidad porque imaginémonos si las mujeres no hubieran abierto esos caminos, ¿dónde estaría América Latina y el Caribe en este momento, en esta coyuntura?
Celina: Dentro de esa mirada al horizonte, que hicieron estas mujeres que antecedieron la creación de la Articulación y que hoy anteceda todas las mujeres que la integran, sabemos que se viene construyendo lo que es el feminismo campesino y popular, que también apoya esas proyecciones y es parte de la responsabilidad que nos han legado como mujeres campesinas. ¿De qué manera se diferencia o cuáles son las características del feminismo campesino y popular qué impulsa la Articulación de mujeres de la CLOC?
Magha: Es una pregunta bien delicada, una no quiere excluir el trabajo que empezaron las mujeres, porque las que primero comenzaron a dar forma al feminismo eran blancas, educadas, tenían la ventaja de poder ser iguales al hombre, en el sentido de que tenían la preparación académica, no eran ajenas a ser educadas, pero sí a seguir la estructura social de una mujer.
Y desde el trabajo feminista, todos los trabajos, desde el principio hasta el presente, son importantes. En el caso del feminismo campesino popular, era una necesidad. Porque las mujeres del campo no encajamos en la estructura social de producción, o sea, cuando el mundo está trabajando de ocho a cinco, nosotras estamos trabajando desde las cinco de la mañana hasta al otro día casi. ¿Quién vela por ese desempeño? En las ruralia, están estas mujeres.
Entonces, no había una estructura dentro del feminismo, o sea una mirada dentro del feminismo que mirara las necesidades y las condiciones en donde las mujeres del campo trabajamos. Porque no es igual una mujer del campo trabajando en una finca a una mujer en el espacio urbano con acceso a transporte, con acceso comunicaciones.
Entonces, las mujeres en los campos tenemos unas necesidades y unas urgencias que son distintas. Leemos la historia y cuál es la historia de las mujeres del campo, indígenas, afrodescendientes. Es como si no existiéramos. El feminismo campesino popular nos ha dado identidad propia.
Al igual que el feminismo anticolonial, anti racista. Lo campesino y popular sirvió como herramienta política, sirvió para pensarnos, para analizar nuestra situación dentro del campo.
Y cuando empezamos a analizarnos, dijimos, «No, definitivamente no”. A nosotros nos explotan de todas las maneras, nos explota el sistema y nos explota toda la estructura rural que no está diseñada para la mujer que vive en el campo.
Así que creo que es una herramienta de política en construcción porque tenemos que mantener esa visión elástica, que se adapte en un mundo que sabemos que cambió y que va a una velocidad que no va a paso de los cambios sociales. Los cambios sociales ocurren, toman décadas.
Entonces, entiendo que esas primeras mujeres que establecieron las pautas de este movimiento fueron vanguardistas. Fueron vanguardistas y entendieron muy bien la realidad del campo y lo que había que hacer.
Celina: Me gustaría analizar cuáles consideras que son los principales logros y desafíos que enfrentamos las mujeres del campo.
Magha: Desde donde yo lo analizo, digo yo y suena individualista, pero lo digo pensando en la realidad de mí territorio, en el que me tocó a nacer, vivir y crecer. Puerto Rico, una colonia perenne, que no ha conocido ningún otro sistema de gobernanza que no sea el colonial. Entonces, la realidad de nosotros choca no solamente con el Caribe, choca con todo el continente.
Que no es que sea diferente, sigo siendo mujer, sigo siendo mujer de campo, soy campesina, pero en ese proceso mío de formación y de educación, pues no respondió a esa mirada latinoamericana, a esa mirada caribeña.
Por lo tanto, los logros y los desafíos los veo mismo como podemos analizar que el feminismo campesino y popular, que creó las bases, abrió el camino, estableció propuesta, agendas de trabajo, pero luego del paso de la pandemia, en donde se consolidó el mundo digital, el mundo dejó de ser análogo, pero nosotros tenemos todavía un montón de población que es análoga. Por lo tanto, la digitalización se ha tornado en otra herramienta de opresión y de segregación porque creemos que todo el mundo tiene acceso y no es así. Y si tenemos acceso, todo depende de la infraestructura que hay en tu territorio.
Si tienes un teléfono 3G, pero hay instalación 5G, eso no va a funcionar nunca. Luego de la pandemia, el mundo cambió, el ordenamiento cambió. Todo lo tenemos que hacer de manera diferente.
Por ejemplo, en esta Séptima Asamblea lo importante es consolidar no solamente la mirada de las mujeres dentro de la CLOC-Vía Campesina, la mirada de todas las mujeres dentro de los movimientos sociales, que es similar porque el mercado es el mismo, porque el capitalismo es el mismo, toma formas diferentes, pero el objetivo es el mismo, explotar, extraer, violar.
Por lo tanto, entiendo yo que estamos en un punto donde tenemos que hacer una nueva agenda, una nueva hoja de ruta para atender esos desafíos. Este año han pasado varios procesos importantes, Nyeleni, la Cumbre de los Pueblos, la COP, el encuentro de agroecología en Cuba. En todos esos espacios e instancia, las mujeres se reunieron.
Y creo que esta Séptima Asamblea sería interesante y si tuviéramos el tiempo, porque hay tanto que hablar y hay tanto que discutir y hay tanto que hacer, pero creo que un buen ejercicio sería analizar todos los insumos que estas actividades, estos encuentros han dejado desde la mirada de las mujeres porque yo estoy segura que es igual. O sea, toma forma diferentes, pero tengo el convencimiento de que todas las mujeres trabajadoras, campesinas, negras, indígenas del planeta coincidimos en los mismos atropellos y con las mismas violencias. Precisamente, porque la estructura de gobernanza global está dominada, no por países, sino por empresa es como si las fronteras del mundo cambiaron y tenemos que ahora detenernos y ver cómo nos insertamos ante estos retos.
Celina: Siguiendo en este mismo sentido de la formación y de la defensa del territorio porque sabemos que eso va a seguir avanzando y si seguimos los pasos de quienes vinieron antes de nosotres y podemos tener esa visión a largo plazo, ¿Cuáles han sido las estrategias que se han dado las mujeres campesinas en términos de formación para seguir defendiendo la tierra y la semilla y entender estas nuevas estrategias también del capital y del extractivismo para meterse en nuestros territorios, para seguir inculcándonos métodos y sistemas que no solo extraen nuestras tierras, sino que también extraen nuestros conocimientos, los capitalizan, los coptan y así de nuevo nos los devuelven como un nuevo conocimiento o como algo que recién se descubre, pero en realidad es un conocimiento ancestral que venimos defendiendo?
Magha: Hay que crear las condiciones para que la mujer no tenga que abandonar el campo, porque si la mujer, como decía nuestra compañera María Josefa en la intervención de esta tarde, las mujeres somos las que luchamos, las muchas son las que cuidamos, históricamente. por lo tanto, hoy, el hecho de que lo virtual y lo digital ocurre en unas plataformas que no vemos, o sea, es como si no ocurriera, pero ocurre, pero quien está en el territorio, vela el territorio, cuida el territorio. ¿Cuántas personas han tratado de contaminar el río que pasa por mi bosque?
Creo que como estrategia, la CLOC Vía Campesina tenemos que buscar la manera de que todas nuestras mujeres puedan quedarse en el campo y crear condiciones y cuidarse unas con otras, porque si abandonamos los campos, los extractivistas y los que necesitan las tierras para plantar sus compañías, todas las bases donde guardan los datos, donde necesitan cantidades de agua pura, porque no son aguas grises que podían ser un uso, estas tecnologías necesitan agua limpia y quienes van a son las afectadas: las mujeres, los niños, que ya tenemos varias comunidades en la CLOC-Vía Campesina en la lucha por el agua extraída por esos intereses. Así que hay muchos retos y los ritmos han cambiado.
Celina: Muchas gracias, Magha, por tu tiempo y por tus palabras. Queria preguntarte una frase o qué palabras le dejarías a las mujeres en general, a las mujeres campesinas, a las mujeres que tengas en la mente cuando pensás en la defensa del territorio y en el mundo que tenemos que seguir construyendo.
Magha: Yo creo que todas las mujeres coincidimos en que nuestras ancestras, nuestras abuelas jugaron un rol. A mí me crió mi abuela. Si hoy yo pude regresar al campo, luego de haber trabajado muchísimo tiempo fuera de los campos, en profesiones que no tenían nada que ver, porque todo el mundo decía que el progreso era dejar las tierras y vender. Y yo le dije, «¿Tú sabes abuela? Lo que tú has hecho en tu vida es lo más importante para salvar a la humanidad, porque la gente tiene que alimentarse todos los días. Es más importante yo saber que esos alimentos que yo voy a consumir, que yo voy a compartir en mi comunidad son alimentos sanos, son alimentos que no van a contaminar ni el cuerpo ni el ambiente ni el agua.
Y ha sido un proceso bien interesante y de toda mi familia en la actualidad, de toda mi familia que fue agrícola que crecimos en el centro de la isla, solamente quedamos dos personas cercanas a la tierra.
Yo estoy casi segura que mi desconexión no ocurrió porque yo tuve a mi abuela, una analfabeta que sembraba, que era dula de muerte en su comunidad, ella era quien ayuda a ese enfermo a morir, ella ha sido mi inspiración, mis ancestros, mi bisabuela que aunque yo era joven la vi trabajando, labrando la tierra y luego toda la familia hizo su casita alrededor del rancho grande, pero luego todo cambió.
Para la Segunda Guerra Mundial el mundo cambió, los como los eventos globales mundiales cambian el curso de las luchas. Y vivimos ese gran reto a la velocidad que estamos viviendo versus la realidad del tiempo que hay que dedicar a análisis de coyuntura, las 24 horas.
Esa es la frase con la que yo inicié mi intervención de hoy, el Caribe tan cerca y tan lejos. Porque relativamente todas las islas estamos cerca. Pero los requisitos de migración, las relaciones políticas, todo lo que configura en estos momentos Estados Unidos en esa nueva agenda, en esta nueva guerra, que es nueva guerra comercial, pero que puede desencadenar en una guerra como que está ocurriendo en Sudan, en Gaza. De Gaza no se ha acabado, Hay demasiados retos. La clave va a ser en rescatar, seguir honrando lo que nos dejaron, no olvidarlo, pero a la vez debemos tener nuevas estrategias. Tenemos que aprender y comprender que todo lo que está ocurriendo en este momento requiere nuevas formaciones, requiere estudios. Así que tenemos mucho trabajo, pero, las mujeres siempre luchamos, nacemos luchando y creo que todas morimos luchando.