Saludamos a los Estados miembros del CSA, a las instituciones participantes y observadoras. Esperamos que este 45 período de sesiones se caracterice por un compromiso renovado con el CSA, para fortalecer el Comité y su contribución para superar la situation alarmante del hambre y malnutrición en el mundo que hoy enfrentamos.
Antes que nada es con enorme placer que les comunicamos hoy que nuestro Mecanismo de la Sociedad Civil se ha fortalecido por la inclusión de los Pueblos Indigenas en su proprio nombre. Después de un año de consulta, el Comité de Coordinación del MSC ha decidido por consenso, y el Foro del MSC ha celebrado, que a partir de ahora nos llamaremos “Mecanismo de la Sociedad Civil y los Pueblos Indígenas para las relaciones con el Comité de Seguridad Alimentaria”. Con esta enmienda del nombre, reafirmamos nuestro reconocimiento de la identidad de los pueblos indígenas y expresamos nuestra plena solidaridad con sus luchas historicas por ser reconocidos en su identidad y su derecho a la autodeterminación como pueblos indigenas.
Estamos enormemente preocupadas porque vemos que vamos por el camino equivocado de cara al logro del objetivo de poner fin al hambre, establecido por los ODS. Hoy, 821 millones de mujeres, hombres, niños y niñas padecen hambre e inseguridad alimentaria y nutricional. 821 millones de personas en todas las regiones del planeta se acuestan cada día sin haber comido.
El Informe del SOFI 2018 nos llama nuevamente la atención y nos impone emprender acciones y compromisos concretos una vez por todas. El hambre y la inseguridad alimentaria son los problemas más importantes que enfrentamos hoy en el mundo. Es una cuestión de derechos humanos. La respuesta más importante a las cifras alarmantes que presenta el SOFI 2018 es que la comunidad internacional tiene comprometerse mas que nunca con el respeto, la protección y la garantía del derecho humano a la alimentación adecuada.
Hoy, en el décimo aniversario del Día Mundial de la Mujer Rural, la condición en la que nos encontramos las mujeres rurales no nos permite una celebración. El 60% de los 821 millones de personas que padecen el hambre son mujeres y niñas. En este aniversario, queremos reiterar la necesidad del compromiso de los Estados en promover acciones y políticas para superar estos datos, como lo han plasmado en el ODS 5 que consiste en: “la construcción de acciones y políticas para la promoción de los derechos de las mujeres en el marco de los derechos humanos, garantizando el derecho a la alimentación así como la promoción de la igualdad y eliminando la violencia y la discriminación hacia las mujeres”.
El Día Internacional de la Mujer Rural lo hemos construido conjuntamente en este espacio para remarcar el valor de la mujer rural, y por eso, entendemos que desde el CSA debemos comprometernos en visibilizar en los plenarios anuales esta fecha tan importante.
Y como mujeres rurales, campesinas, pescadoras, indígenas, pastoras, trabajadoras, jóvenes, consumidoras y sin tierra creemos que es fundamental que los Estados reconozcan el aporte que hacemos las mujeres para superar la inseguridad alimentaria y el hambre. Con nuestra producción, alimentamos a los pueblos y contribuimos a la seguridad alimentaria pero también a la soberanía alimentaria de los pueblos desde una práctica agroecológica y desde una perspectiva feminista de igualdad entre los géneros.
Esperamos que en el 20mo aniversario podamos de verdad conmemorar los avances hacia este objetivo que tenemos en común con los estados miembros aquí presentes y creemos que las mujeres tenemos mucho que colaborar en ello. ¡Que las mujeres, personas y pueblos puedan realizar su derecho a la alimentación, igualdad y derecho a vivir sin violencia y sin discriminación!