28 de abril de 2014
En defensa de la agricultura sostenible, la alimentacion saludable, y la madre tierra
Exigimos al presidente de la república no aprobar ley que permite importacion de plaguicidas
La Confederación Nacional Agraria, (CNA); la Federación Nacional de Mujeres Campesinas Artesanas Indígenas Nativas y Asalariadas del Perú (FENMUCARINAP); y la Confederación Campesina del Perú, (CCP), integrantes de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo – VIA CAMPESINA, como organizaciones representativas de las familias campesinas indígenas en el Perú, nos dirigimos al Presidente de la República, Ollanta Humala Tasso; y a las autoridades públicas competentes en materia de agro, salud y ambiente, para expresar lo siguiente:
Mientras en otros países en pro de la salud pública y la naturaleza, las regulaciones para el uso de agrotóxicos son cada vez más severas, ya que está comprobado su nocividad en la vida humana por ser agentes de contaminación, nuestro país ha dado un salto atrás con la reciente aprobación en el Congreso de la República de la Ley que facilita la importación de plaguicidas.
La ley en mención, fue presentada por la Comisión Agraria, y propone la simplificación de los procedimientos así como la reducción de costos para que los agricultores puedan importar directamente plaguicidas genéricos de uso agrícola, con el sustento de que de que fortalecerá la competitividad en la producción agrícola, sin importar los efectos adversos de estos químicos en la salud de los propios agricultores, sus familias, los consumidores, así como afectación a los suelos agrícolas.
A esta preocupante medida se suma la demanda de la AGAP, asociación de agroexportadores que exige la suspensión de la Decisión 436 de la CAN, que era la norma que regulaba el uso y control de los plaguicidas químicos desde el año 2002. Con la suspensión de esta norma y la promulgación de la Ley, lo que estos agricultores pretenden es evadir las evaluaciones exigidas para su registro sin valorar los costos en la salud y en el ambiente y tener carta libre para el uso de los nocivos plaguicidas, sin una instancia que controle su uso.
La Decisión 436 es una norma de suma importancia, ya que luego de varios años de trabajo los cuatro países de la Comunidad Andina de Naciones la aprobaron con el fin de proteger la vida, la salud y el goce de un ambiente sano, justamente para darle a las autoridades en materia de salud, ambiente y sanidad vegetal un instrumento que permite evaluar los plaguicidas y restringir su uso.
Frente a lo expuesto, exigimos que al Presidente Ollanta Humala Tasso, en cumplimiento de su rol de salvaguarda de la salud de las familias, no apruebe la Ley que modifica la Ley de Sanidad Agraria (Ley 1059).
De aprobarse esta Ley, además de estar poniendo en riesgo la salud de millones de consumidores, se estará perjudicando a miles de familias campesinas que venimos luchando por una agricultura sostenible y una alimentación saludable; esta norma permitirá una intensificación del uso de plaguicidas tóxicos, perjudicando incluso a la tan apoyada agroexportación, que cada vez tiene controles de calidad que rechaza los productos en los que se encuentra restos de estos químicos.
El uso indiscriminado y excesivo de agrotóxicos es parte del sistema de producción a gran escala que se constata como insostenible, de alta contribución a los gases de efecto invernadero, fuente principal de causa del efecto invernadero y del Cambio Climático. Acercándose la Cumbre Mundial sobre Cambio Climático (COP20) que se celebra en Perú, no se puede pretender tener una política coherente e integral de lucha contra el Cambio Climático como país y obviar o no considerar todos los factores que influyen de forma importante en dicha problemática, entre ellos el modelo de producción agropecuario.
No es coherente destinar cantidades enormes de dinero a mitigar y adaptarse a las consecuencias del cambio climático, y no hacer los mismos esfuerzos en prevenirlo y proteger los modelos de producción sostenibles que ya tenemos en el país, vinculados con la agricultura familiar sostenible y los sistemas de producción campesina e indígena.
Por otra lado, desde la articulación nacional de la CLOC-VIA Campesina en el Perú, hacemos un llamado a todos los colectivos, organizaciones agrarias, productores ecológicos, y consumidores, ha hacer frente a esta iniciativa de Ley que ocasionara en el futuro irreversibles daños ambientales, sociales y económicos, y que además tendrán unos altísimos costos para el Estado derivados de ellos, que no se están valorando y que terminarán pagando los ciudadanos. (contaminación, enfermedades, etc.).
Cabe precisar las organizaciones campesinas unidas en la CLOC-Via Campesina, hemos iniciado una gran Campaña Mundial contra los agrotóxicos y por la vida, la cual busca denunciar la estrecha relación entre los agrotóxicos y las distintas consecuencias del modelo agroindustrial, en la salud, la contaminación y la dependencia económica.