Delegación de la Vía Campesina a Cancún, 9 de diciembre de 2010
Los miembros de La Vía Campesina de más de 30 países de todo el mundo juntamos nuestras miles de luchas en Cancún para exigir a la Cumbre sobre Cambio Climático (COP 16), justicia ambiental y respeto a la Madre Tierra, para denunciar los ambiciosos intentos de los gobiernos, principalmente del Norte, de comercializar todos los elementos esenciales de la vida en beneficio de las corporaciones trasnacionales y para dar a conocer las miles de soluciones para enfriar el planeta y para frenar la devastación ambiental que hoy amenaza muy seriamente a la humanidad.
Tomando como principal espacio de mobilización el Foro Alternativo Global por la Vida, la Justicia Social y Ambiental, nosotras y nosotros celebramos talleres, asambleas, reuniones con nuestros aliados y una acción global que llamamos los miles de Cancún y que repercutió por todo el planeta y hasta en las mismas salas del Moon Palace de la COP 16. Esta acción del 7 de diciembre, tuvo como expresión de nuestra lucha una marcha de miles de miembros de La Vía Campesina acompañados por los indígenas Mayas de la península mexicana y nuestros miles de aliados de organizaciones nacionales e internacionales.
La movilización hacia Cancún inició desde el 28 de noviembre con tres caravanas que partieron desde San Luis Potosí, Guadalajara y Acapulco, que recorrieron los territorios más simbólicos de la devastación ambiental pero además de las resistencias y las luchas de las comunidades afectadas. El esfuerzo de las caravanas fue un trabajo conjunto con la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales, el Movimiento de Liberación Nacional, el Sindicato Mexicano de Electricistas y cientos de pueblos y personas que nos abrieron las puertas de su generosidad y solidaridad. El 30 de noviembre arribamos con nuestras caravanas a la Ciudad de México, celebramos un Foro Internacional y una marcha acompañados de miles de personas y cientos de organizaciones que también luchan por la justicia social y ambiental.
En nuestra jornada hacia Cancún, otras caravanas, una de Chiapas, otra de Oaxaca y una de Guatemala, después de muchísimas horas de viaje, se unieron en Merida para celebrar una ceremonia en Chichen Itza y finalmente llegar a Cancún el 3 de diciembre para instalar nuestro campamento por la Vida y la Justicia Social y Ambiental. Al día siguiente, 4 de diciembre, abrimos nuestro foro y así dimos inicio a nuestra lucha en Cancún.
¿Por qué llegamos a Cancún?
Los actuales modelos de consumo producción y comercio han causado una destrucción medio ambiental de la cual los pueblos indígenas, campesinos y campesinas somos las principales victimas. Así que nuestra mobilización hacia Cancún y en Cancún es para decirle a los pueblos del mundo que necesitamos un cambio de paradigma de desarrollo y economía.
Hay que trascender el pensamiento antropocéntrico. Hay que reconstituir la cosmovisión de nuestros pueblos, que se basa en el pensamiento holístico de la relación con el cosmos, la madre tierra, el aire, el agua y todos los seres vivientes. El ser humano no es dueño de la naturaleza, si no que es parte de todo lo que tiene vida.
Ante esta necesidad de reconstituir el sistema, el clima, la madre tierra, denunciamos
1. Que los gobiernos continúan indiferentes ante el calentamiento del planeta y en vez de debatir sobre los cambios de políticas necesarias para enfriarlo, debaten sobre el negocio financiero especulativo, la nueva economía verde y la privatización de los bienes comunes.
2. Las falsas y peligrosas soluciones que el sistema capitalista neoliberal implementa como la iniciativa REDD+ (Reducción de emisiones por deforestación y degradación); el MDL (Mecanismo de Desarrollo Limpio), la geoingeniería, representan comercialización de los bienes naturales, compra de permisos para contaminar o créditos de carbono, con la promesa de no talar bosques y plantaciones en el Sur.
3. La imposición de la agricultura industrial a través de la implementación de productos transgénicos y acaparamiento de tierras que atentan contra la Soberanía Alimentaria.
4. La energía nuclear, que es muy peligrosa y de ninguna manera es una verdadera solución.
5. Al Banco Mundial, al Fondo Monetario Internacional, a la Organización Mundial de Comercio por facilitar la intervención de las grandes transnacionales en nuestros países.
6. Los impactos que ocasionan los tratados de libre comercio con los países del Norte y la Unión Europea, que no son más que acuerdos comerciales que abren más las puertas de nuestros países a las empresas transnacionales para que se adueñen de nuestros bienes naturales.
7. La exclusión de los campesinos y pueblos indígenas en las discusiones de los temas trascendentales en la vida de la humanidad y de la madre tierra.
8. La expulsión de Compañeros y compañeras del espacio oficial de la COP 16 por su oposición a los planteamientos de los gobiernos que apelan por un sistema depredador que apuesta por exterminar a la madre tierra y a la humanidad.
No estamos de acuerdo con la simple idea de “mitigar” o “adaptarnos” al cambio climático. Se necesita justicia social, ecológica y climática, por lo que exigimos:
1. Retomar los principios de los acuerdos de Cochabamba del 22 de abril del 2010 como un proceso que realmente nos lleve a la reducción real de la emisión de gases de carbono con efectos invernaderos y para lograr la justicia social y ambiental.
2. La Soberanía alimentaria en base a la agricultura campesina sustentable y agroecológica dado a que la crisis alimentaria y la crisis climática son lo mismo, ambas son consecuencias del sistema capitalista.
3. Es necesario cambiar los estilos de vida y las relaciones destructivas del medio ambiente. Hay que reconstituir la cosmovisión de nuestros pueblos originarios, que se basa en el pensamiento holístico de la relación con el cosmos, la madre tierra, el aire, el agua y todos los seres vivientes.
La Vía Campesina como articulación que representa a millones y millones de familias campesinas en el mundo y preocupados por la recuperación del equilibrio climático llama a:
1. Asumir la responsabilidad colectiva con la madre tierra, cambiando los patrones de desarrollo de las estructuras económicas y desapareciendo a las empresas transnacionales.
2. Reconocemos a gobiernos como el de Bolivia, Tuvalu y algunos mas, que han tenido la valentía de resistirse ante la imposición de los gobiernos del Norte y de las corporaciones transnacionales y hacemos un llamado para que otros gobiernos se sumen a la resistencia de los pueblos frente a la crisis climática.
3. Tomar acuerdos obligatorios de que todos los que contaminen el ambiente deben rendir cuentas por los desastres y delitos cometidos contra la madre Naturaleza. De igual forma obligar a reducir los gases de carbono en el lugar donde se genera. El que contamina debe dejar de contaminar.
4. Alertamos a los movimientos sociales del mundo sobre lo que acontece en el planeta para defender la vida de la madre tierra porque estamos definiendo lo que será el modelo de las futuras generaciones.
5. A la acción y a la movilización social de las organizaciones urbanas y campesinas, a la innovación, a la recuperación de las formas ancestrales de vida, a unirnos en una gran lucha para salvar a la madre tierra que es la casa de todos y todas contra el gran capital y de los malos gobernantes, es nuestra responsabilidad histórica.
6. A que las políticas de protección a la biodiversidad, soberanía alimentaria, manejo y administración del agua se basen en las experiencias y participación plena de las propias comunidades.
7. A una consulta mundial a los pueblos para decidir las políticas y las acciones globales para detener la crisis climática.
¡Hoy!, Ahora mismo llamamos a la humanidad para actuar inmediatamente por la reconstitución de la vida de toda la madre naturaleza, recurriendo a la aplicación del “cosmovivir”.
Por eso, desde las cuatro esquinas del planeta nos levantamos para decir: ¡No más daño a nuestra Madre Tierra! ¡No más destrucción al planeta!. ¡No más desalojos de nuestros territorios! ¡No más muerte a los hijos e hijas de la Madre Tierra! ¡No más criminalización de nuestras luchas!
No al entendimiento de Copenhague. Si a los principios de Cochabamba
¡Redd NO! ¡Cochabamba SI!
¡LA TIERRA NO SE VENDE, SE RECUPERA Y SE DEFIENDE!
GLOBALICEMOS LA LUCHA, GLOBALICEMOS LA ESPERANZA
El presidente boliviano, Evo Morales, participará este jueves 9 de Diciembre en el Encuentro de los Pueblos en el marco del Foro por las Vida, Justicia Climática y Social organizada por la Vía Campesina y otras organizaciones en Cancún, México. La visita del mandatario ratifica el apoyo y solidaridad con los espacios alternativos que se han convocado en el marco de la COP 16 que inició el pasado 29 de noviembre y cuya clausura será el 10 de diciembre.
La llegada de Morales está prevista para pasado el medio día, exactamente a las 15h00, en la Unidad Deportiva Jacinto Canek donde están las instalaciones del Campamento de la Vía Campesina.
En el Campamento de la Vía Campesina participan cerca unas dos mil personas de diversos países de mundo entre ellos mujeres y hombres, jóvenes y niños, afectados por la destrucción del medio ambiente, agricultores, campesinos sin tierra, pueblos indígenas y activistas de todos los sectores sociales en una convocatoria que se prolongará hasta el 10 de de diciembre en Cancún.
Según declaraciones oficiales Evo abordará temas como el manejo integral de los bosques nativos y la selva, respeto a la soberanía alimentaria de los países, el pleno cumplimiento de los derechos de los Pueblos Indígenas, el financiamiento de los países desarrollados a los países en vías de desarrollo y el reconocimiento de la Madre Tierra, además, la posibilidad de la construcción de un proyecto popular y los desafíos de los movimientos sociales en la lucha por la justicia climática.
“…Sabemos que habrá Madre Tierra sin vida humana, pero no habrán seres humanos son la Madre Tierra, No mercantilicemos la vida” señaló el presidente de Bolivia.
Silvia Ribeiro, Directora para América Latina del Grupo ETC, en una entrevista realizada en el campamento de La Vía Campesina en Cancún enfatizó “ En la COP 16 se está priorizando una propuesta empresarial de la vida” con relación a la Cumbre Climática que se está realizando en México desde el 29 de Noviembre y que irá hasta el próximo 10 de Diciembre. A continuación recogemos algunas de sus ideas principales con relación a la crisis climática y las falsas soluciones que presenta la COP 16.
De manera general nos puedes comentar ¿Cómo están las correlaciones de fuerzas al interior de la COP 16? ¿Cómo están articulados?
Desde mi mirada, el grupo 77 ( grupo de países en desarrollo que coordinan la defensa de sus intereses en las negociaciones internacionales, que reúne a unos 130 países, que se benefician del Sistema de Preferencias Generalizadas) y china es un grupo que tienen algunos puntos en común. Por otro lado, están sectores nuevos entre ellos el que más se destaca por su propuesta son los países del ALBA quienes tienen como bandera de lucha la Declaración de los Pueblos de Cochabamba. Asimismo, hay otro, el grupo de los países islas que son los directamente afectados y el grupo africano que es pequeño. Luego están los países que son los principales emisores, por ejemplo China está en una situación especial porque es el país que emite mayor cantidad de gases Cabe resaltar que con la negativa de un solo país se pueden bloquear las negociones, Bolivia lo podría hacer pero tiene fuertes críticas hacia su economía y principios políticos, por lo que sería ideal si hay más países que se sumen a esta negativa.
¿Crees qué se está aislando a Bolivia de las negociaciones?
Hay un trabajo muy grande de Estados Unidos de dejar sola la propuesta boliviana, porque se percibe como la propuesta más radical, cuando realidad lo que está haciendo Bolivia es respetar los acuerdos de de la Conferencia de Pueblos de Cochabamba donde participaron más de 35 000 000 de 142 países. En esta Declaración se resalta la obligatoriedad de respetar el Protocolo de Kyoto y por otro lado, la Declaración Mundial de los Derechos de la Madre Tierra. En ese sentido, se ve a esta propuesta como una posición muy radical, cuando en realidad plantea lo mínimo. Es así, que la estrategia de los opositores es aislar a Bolivia.
¿Qué pasa con el protocolo de Kioto?
Desde mi punto de vista, el Protocolo de Kioto es muy débil y tiene muchísimos defectos, por eso incluso los países del ALBA junto con el G77 proponen un segundo periódico porque es el único documento que es legalmente obligatorio, y no basta con las buenas intenciones de los países de reducir emisiones. Pero personalmente considero que otra estrategia es no sacar ningún acuerdo, ese es el patrón, no se quiere ir al núcleo del acuerdo que es reducir las emisiones. En realidad quieren crear un vacío desde el punto de vista internacional, pero firmar algunos acuerdos como REDD (Reducción de emisiones de deforestación y degradación) ahora se suma agricultura, fomentar el mercado de carbono y el acuerdo sobre crear un fondo de financiación bajo sus propias condiciones y el acuerdo de crear de tecnología que es el acuerdo más gris, porque la mayoría de la gente no sabe qué quiere decir aunque es muy peligroso, porque es por ahí que quieren empezar a meter en nuestros países la cantidad de tecnología gris, desde la energía nuclear hasta los transgénicos . No quieren que haya nada vinculante aunque le van a seguir apostando a los mecanismos de desarrollo limpio, como el mercado de carbono incluso introducir nuevos elementos al mercado de carbono como la agricultura que antes no estaba y por otro lado no tener nada a qué responder.
¿Consideras que hay un discurso empresarial de la vida dentro de las discusiones de COP 16?
SÍ, es cierto que hay un avance enorme de mercantilización de la vida, ya estaba desde antes pero en los últimos años se ha fortalecido entonces se esta discutiendo como privatizar el aire, quien va a tener acceso al aire. El capitalismo se ha caracterizado siempre por sacar de los desastres que provoca un nuevo negocio, entonces mientras más grande es el desastre mayor es el negocio, es lo que están haciendo con los bosques como sumideros de carbono. Es así que nos unimos a organizaciones como la Vía Campesina al decir no a REDD.
La idea general es que no existe naturaleza, ni bosque, ni vida, todo lo que tenga celulosa es biomasa, y todo puede ser fuente de combustible o de cualquier otra cosa porque a través de la ingeniería genética extrema, la biología sintética crea seres vivos en laboratorios, la idea de los seres vivos artificiales pueden crear genes artificiales en laboratorio pero no solo uno millones. Y esto ya se está desarrollando en países como Brasil, entonces quieren procesar todo incluso la Vida. De ahí el surgimiento de la Bioeconomía.
Según tus planteamientos ¿Qué es la Bioeconomía?
Hemos identificado tres fases de la bioeconomía: 1) Tiene que ver con los servicios ambientales, los servicios de la naturaleza que se la ha mercantilizado, los mercados de carbono son un ejemplo, el aire, el agua separado de la gente, la bioeconomía de los servicios ambientales. 2) La biotecnología hecha a partir de los transgénicos, la farmacéutica a través de manipulación de los genes. Y finalmente, 3) Biomasa, todo es biomasa que se puede procesar de diferentes maneras, el resultado de esto es terrible porque no alcanza la biomasa que existe en el planeta entonces las soluciones de las transnacionales es sacar la celulosa de dónde sea así tengan que comercializar con la vida. “No existe un cambio climático, hay una crisis climática causada por el capitalismo y por combustibles fósiles”.
¿Por qué REDD NO?
La REDD el intento es poner a los bosques dentro del mercado de carbono y los bosques hasta ahora no estaban en este mercado, porque los bosques están vivos y al estar vivos no se puede calcular porque los bosque absorben y emiten gases de carbono, además todos los bosques distintos con diferentes tipos de vegetación y tierra y todo eso hace que no se puedan calcular la cantidad de carbono. Entonces REDD marcaría el inicio de la comercialización de la vida, pues es mecanismo para vender el aire de los bosques dentro del mercado. En la práctica sucede que se pone a la venta, teóricamente, todos los bosques del mundo son una nueva fuente de especulación para el mercado financiero.
Y dentro de este mecanismo hay tres aspectos complementarios: 1) Servicios ambientales y es un incentivo para quienes talan bosques, para los deSforestadores. 2) Manejo sustentable del bosque, es sacar a los pueblos originarios del manejo de su territorio porque ellos no los podrían tocar. Es una manera de desplazar a los indígenas de sus tierras 3) y finalmente es una acción especulativa el proyecto de REDD más grande del mundo lo hace la SHELL. No solamente se quedan con el aire del bosque y sino con los suelos del bosque sino que además sacan ganancia de esto. Es así, es mejor que no haya acuerdo a que haya acuerdo malo de hecho desde el punto de vista de los movimientos debemos apreciar que Bolivia se oponga a que haya un acuerdo, podemos seguir avanzando en acuerdos que cada vez vayan empeorando.
¿En este contexto, cual es el llamado a los movimientos?
Desde los movimientos debemos seguir trabajando desde la organización local, desde las bases y en coordinación de los movimientos, pero siempre desde las bases, haciendo trabajados paralelos, eso creo que es lo que realmente sirve, el trabajo de organización horizontal entre movimientos a nivel internacional y local, pues como ha dicho la Vía Campesina los pueblos tienen las verdaderas alternativas. Lo que pasa es que la COP únicamente están los gobiernos y las transnacionales. Hay que dejar claro que no solamente estamos rechazando estos acuerdo sino que nosotros si sabemos cómo salir de esta crisis por eso es importante que la Vía Campesina este en Cancún. Asimismo, veo importante el llamado a los miles de Cancún la idea es llamar a que de todas partes hagan sus manifestaciones.
Participan en la marcha representantes de los gobiernos de Bolivia y Paraguay
(Cancún, Q. R., México, 7 de diciembre) En medio de un operativo policial excesivo, unas diez mil personas recorrieron las calles principales de Cancún en la Marcha Campesina Indígena y Social convocada por La Vía Campesina, bajo una consigna muchas veces repetida que sintetizó las demandas de los manifestantes: Cochabamba sí; REDD no.
Ha sido muy valiente La Vía Campesina al salir a las calles, ya que había muchas presiones y fuerzas que se oponían a que se movilizara o sugerían que lo hiciera de un modo light, dijo Paul Nicholson, integrante de la coordinación internacional del movimiento campesino.
El contingente se movilizó buena parte del día, en una jornada que inició desde las 8 de la mañana y concluyó hasta las 5 de la tarde, con recorridos a pie y en autobús. Nicholson subraya el tema reiterado en varios idiomas y en formas diversas, incluso artísticas, durante la marcha: “Nuestra demanda es no a la REDD y no a las falsas soluciones, nosotros queremos la aplicación de medidas de cambio sistémico que vayan a la raíz de la crisis climática.”
El dirigente campesino proveniente del País Vasco informó que durante el día hubo foros, marchas y otras acciones en más de 37 países, atendiendo el llamado de La Vía Campesina para crear Miles de Cancún, con el fin de presionar globalmente sobre las negociaciones de la cumbre del clima.
“Los de la COP16 viven en otro planeta, incluso el lugar donde se reúnen lo evidencia: el Moon Palace, son lunáticos que viven fuera de la realidad. Nosotros, en cambio estamos en la Tierra en la lucha por la vida”, ironizó Nicholson.
Alberto Gómez, representante de La Vía Campesina Región Norte de América, coincide: “Es necesario que los gobiernos representados en la COP16 dejen de hablar de negocios y se pongan a hablar del clima; la REDD y los mercados de carbono son sólo negocios y oportunidades para la expansión del dominio de las empresas trasnacionales.
“Demandamos que el Acuerdo de los Pueblos de Cochabamba sea considerado en el documento de negociación para que los países ricos se comprometan a reducir sus emisiones de gases invernadero a la mitad antes de que termine la presente década, y sea instituido el Tribunal Internacional de Justicia Climática y Ambiental, entre otras medidas”, añade.
“La agricultura campesina enfría el planeta, y puede garantizar el derecho a la alimentación para todos, mediante políticas que impulsen la soberanía alimentaria”, afirma Gómez.
Solón y Lovera en la marcha
Asistentes a la COP16, Pablo Solón y Miguel Lovera, embajador de Bolivia ante la ONU y asesor de la Presidencia de Paraguay, respectivamente, fueron al encuentro de los manifestantes y se integraron a la marcha hacia las 13:00 horas.
Ellos tomaron la palabra en la asamblea de los pueblos realizada a medio kilómetro de la valla policial que impedía el paso en el camino al Moon Palace, a la altura del aeropuerto.
Solón dijo que hay un cambio sustancial en las negociaciones en el espacio de la COP16 con relación a años anteriores, ya que ahora la discusión está instalada adentro y las propuestas de la sociedad están siendo escuchadas directamente y tomadas en cuenta por muchas delegaciones.
“Nuestra voz es su voz, tengan confianza en que sus propuestas estarán reflejadas en las negociaciones”, dijo Solón en su intervención ante los manifestantes.
El delegado ante la COP16 por Paraguay, Miguel Lovera, enfatizó el impacto de la crisis del clima en la vida y salud de las personas y contabilizó en 300 mil las muertes al año ocasionadas por este fenómeno.
“Es necesario bajar el consumo, tenemos que reducir la codicia, debemos dejar de despilfarrar los recursos necesarios para que todos vivamos bien”, para poder revertir la crisis ambiental, dijo.
Después de varios oradores de las organizaciones convocantes como la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales, el Movimiento de Liberación Nacional, el Sindicato Mexicano de Electricistas y La Vía Campesina, los manifestantes regresaron ordenadamente al campamento, sin incidentes que lamentar.
Mañana continuarán las actividades del Foro Global “Por la Vida y la Justicia Ambiental y Climática”, hasta el día 10 de diciembre, en el campamento que La Vía Campesina y organizaciones aliadas instalaron en Cancún.
(Cancún, 7 de diciembre de 2010) La Vía Campesina, el movimiento más grande del mundo de campesinos y pequeños agricultores fue acompañada por Pablo Solón, embajador de Bolivia ante las Naciones Unidas, Tom Goldtooth del Indigenous Environmental Network (Red Indígena del Medio Ambiente), Ricardo Navarro de Amigos de la Tierra Internacional y varios representantes de gobiernos de los países del ALBA durante el COP 16 el día de hoy en Cancún, México. Condenaron las falsas soluciones y acuerdos secretos impulsados en las negociaciones. Llamaron a movilizaciones y acciones en todo el mundo para impulsar las soluciones a la crisis climática que se basen en conocimientos indígenas tradicionales, en las prácticas de comunidades, los derechos humanos y los derechos de la naturaleza.
El grupo realizó una conferencia de prensa en el Moon Palace, el centro turístico opulento donde la tensa y difícil convención del clima ha pasado a la fase de alto nivel esta semana. La conferencia de prensa terminó con Luis Enrique Noura del MST, el Movimiento de los Trabajadores sin Tierra de Brasil quien guió al grupo gritando “¡Globalicemos la lucha, globalicemos la esperanza!” El grupo entonces abandonó el edificio los jóvenes del grupo estadounidense, Grassroots Global Justice Alliance (Alianza Global de Justicia) quienes gritaron consignas “¡No a REDD, no a REDD!”
“Hemos hecho llamadas por miles de Cancúns en todo el mundo para el día de hoy” dijo Josie Riffaud de La Vía Campesina, refiriéndose a la necesidad que las comunidades de base tomen la iniciativa de proponer soluciones a la crisis ecológica. “La primera iniciativa tuvo lugar hoy dentro del Moon Palace”.
Anne Peterman del Global Justice Ecology Project abrió el evento recordando al nombre de Lee Kyung Hae, el campesino de Corea del Sur y miembro de la Vía Campesina quien se tomó la vida durante las movilizaciones contra la Organización Mundial del Comercio aquí en 2003, llevando un letrero que decía “la OMC mata campesinos”.
“Entonces luchábamos contra la Organización Mundial del Comercio”, dijo Petermann. “Hoy tenemos que luchar contra la Organización Mundial del Comercio del Carbono.”
“Estamos viendo que el gobierno Mexicano está tratando de sacar un acuerdo de Cancún, pero en el espíritu de Copenhague, tanto en cuanto al proceso de negociaciones como en su contenido”, dijo Ricardo Navarro de los Amigos de la Tierra Internacional. “Estamos observando reuniones paralelas y secretas”.
Mari Rose Raruc del Asia Pacific Environmental Network (Red del Medio Ambiente de Asia y el Pacífico) habló de los miles de Cancuns ocurriendo en los Estados Unidos. “Tenemos acciones y eventos en más de 30 estados en los Estados Unidos, organizados por personas sufriendo el efecto de la contaminación y el cambio climático”.
Representantes de los países del ALBA expresaron su solidaridad con el pueblo y condenaron la búsqueda de los países desarrollados para evitar su responsabilidad histórica y deuda climática. “Se habla mucho en Cancún sobre dinero, sobre sierras eléctricas y sobre plantaciones pero se habla muy poco sobre los bosques o sobre el trabajo real de las personas que tienen que confrontar el cambio climático día a día”, dijo Miguel Lovera, consejero principal de Paraguay. Paul Oquin, el líder de la delegación Nicaragüense expresó públicamente el apoyo de Nicaragua y los países del ALBA a la Vía Campesina y todos los movimientos sociales en su lucha.
En los escalones del Moon Palace, junto con los representantes de los movimientos sociales, el embajador Boliviano Pablo Solón dijo que lo más importante es la lucha de la gente y sus exigencias por soluciones verdaderas al cambio climático. “Si el incremento en la temperatura aceptado es de cuatro grados, como lo estamos viendo en las negociaciones ahora, vamos a ver a cientos de miles de personas que morirán. Cada año, 300,000 personas mueren en desastres naturales causados por el cambio climático. Esto crecerá a ser millones si no logramos, aquí, un acuerdo real, en lugar de un Cancún-hagen”.
La conferencia de prensa y la acción que siguió fue coordinada paralelamente con una marcha de 5.000 personas en las calles, guiados por La Vía Campesina. Movimientos Sociales y representantes de la sociedad civil, junto con el Embajador Pablo Solón y el consejero principal de Paraguay, Miguel Lovera, entonces salieron a juntarse con los pequeños campesinos, pueblos indígenas, mujeres, pueblos afectados por el medio ambiente, organizaciones ambientales y otros movimientos sociales y activistas quienes marcharon durante horas en el fuerte sol de México, culminando en la Asamblea de los Pueblos, la cual tuvo lugar en la calle.
“Hoy hubo mil Cancúns en todo el mundo y con esto estamos enviando el mensaje a los gobiernos dentro de las negociaciones que los pueblos tienen mil soluciones a la crisis climática y que sostienen los derechos de los pueblos y de la madre tierra”, dijo Carlos Marentes de la Vía Campesina.
Miles de mujeres y hombres, jóvenes y niños, afectados por la destrucción del medio ambiente, agricultores, campesinos sin tierra, pueblos indígenas y activistas de todos los sectores sociales se toman las calles de Cancún y de todo el mundo como parte del Día de la Acción Global por la justicia climática que se celebra mañana 7 de diciembre y que ha sido convocada por la Vía Campesina Internacional.
La marcha que se realiza en el marco del Foro Por la Vida, Justicia Social y Ambiental en Cancún, México tiene como consigna principal “Las campesinas y campesinos enfriamos el planeta”, la cual resume los planteamientos de los pueblos, que además, están plasmadas en las resoluciones que salieron de la Cumbre efectuada en Cochabamba, Bolivia.
Con banderas de un sinfín de colores, con gorras, carteles, afiches, y mucha música las y los manifestantes anunciarán ante los líderes mundiales su oposición a los mecanismos que se pretenden imponer en la COP 16, entre ellas las propuestas de mercado para el Comercio de Carbono, REDD, los agrocombustibles y la geoingeniería; que son las principales falsas soluciones que quieren imponer a los pueblos del mundo.
La marcha saldrá a las 9:00 a.m, desde la Unidad Deportiva Jacinto Canek donde se concentran aproximadamente 10 000 personas y se espera que recorra las principales avenidas y calles del centro de la ciudad. Esta acción será parte de las miles de actividades que se efectuarán en todo el mundo, en toda América Latina, Asia, Europa y Africa así como en los Estados Unidos y Canadá. Las acciones incluyen asambleas populares, plantones y foros en Corea, Ecuador, Perú, Uruguay, Brasil, Nepal, Turquía, y acciones de masas en la India, Argentina, Indonesia, El Salvador, Filipinas y México. Se estima que estas acciones y eventos reunirán a más de 1 millón de personas.
El poder popular que se generará con las acciones busca llevar soluciones justas y sostenibles a escala para resolver la crisis climática que hoy nos afecta. En este contexto, las negociaciones de la COP 16 se puede ver en su verdadera perspectiva: como un pequeño sector de la esfera del cambio climático – y específicamente en la arena impulsada por las corporaciones multinacionales cuyas negociaciones están más orientados hacia el ahorro de las empresas de combustibles fósiles y el sistema económico neo-liberal en lugar de hacer las decisiones difíciles que se necesita para crear justicia social y ambiental.
Está surgiendo un nuevo orden económico mundial con la agricultura como nexo – específicamente la biomasa. Los políticos y ejecutivos de empresas se refieren a la nueva «bioeconomía», afirmando que la humanidad puede pasar de una economía global basada en los combustibles fósiles a otra basada en la biomasa derivada de los cultivos agrícolas, los bosques y las algas. Considerada como «limpia», «verde» «renovable» y «sostenible», las falsas soluciones propuestas por los gobiernos y las empresas transnacionales como respuesta a las crisis climática, energética y alimentaria, están impulsando la expansión de la bioeconomía.
Sin embargo, bajo estas afirmaciones, la bioeconomía está facilitando la expansión de la agricultura industrial, y la integración vertical y la consolidación del mercado de las empresas agroindustriales transnacionales (TNCs).
La United Nations Framework Convention on Climate Change (UNFCCC) se está convirtiendo rápidamente en una plataforma para legitimar, regular y ampliar la bioeconomía. Las multinacionales Big Grain, Big Biotech y Big Forestry se benefician del número cada vez mayor, el alcance y el porcentaje de metodologías agrícolas aprobadas por la UNFCCC para las compensaciones de las emisiones de carbono, captura de carbono y adaptación al cambio climático. Sin embargo, en lugar de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y estabilizar el clima, las falsas soluciones a la crisis climática proporcionan nuevas formas para que las empresas transnacionales se expandan y consoliden el control de las semillas, tierras, aguas y bosques, y por lo tanto representan una amenaza grave para los agricultores, los pueblos indígenas, pescadores y los trabajadores rurales.
Las falsas soluciones a la crisis climática se basan en mitos, específicamente los de una biomasa ilimitada y renovable. Incluso las llamadas energías renovables, por ejemplo los cultivos agrícolas para agrocombustibles, dependen de recursos limitados como el área de tierra geográfica, los nutrientes de la tierra y el agua fresca. Así, nos dicen que la biotecnología resolverá el problema de los recursos limitados. Muchas de las falsas soluciones propuestas por la UNFCCC se basan en los mitos mencionados e integran otros, en particular que el mismo modelo económico-las mismas multinacionales- que han creado la crisis climática serán ahora la solución a la crisis mediante el mercado de bonos de carbono. El mercado de bonos de carbono también se basa en mitos, específicamente el de que todas las emisiones de gas con efecto invernadero, en todas partes, pueden ser reguladas y controladas por un único sistema global completo gestionado por los mismos financieros y corporaciones que provocaron la crisis climática. El mercado de bonos de carbono se fundamenta en varios mecanismos míticos:
• Mediante la aplicación del Clean Development Mechanism (CDM), los países industrializados y las multinacionales del Norte Global pueden seguir emitiendo la misma cantidad de gases con efecto invernadero al mismo ritmo y aún así cumplir con las reducciones de emisiones exigidas mediante la financiación de proyectos CDM, la mayoría de los cuales están en países en vías del desarrollo del Sur Global.
• Las compensaciones de carbono, basadas en un sistema de comercio de derechos de emisión, se producen cuando una multinacional contaminante compra bonos para reducir, evitar o capturar emisiones que suceden en otros lugares, en lugar de reducir emisiones de estas se producen.
• La captura de carbono sostiene que las emisiones pueden continuar siempre y cuando se capture la misma cantidad de emisiones en otros lugares. El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático considera que la captura de carbono en tierra ofrece el mayor potencial para la mitigar el cambio climático en la agricultura. Según Wikipedia, la captura de carbono es el proceso de eliminar el carbono de la atmosfera y almacenarla en un depósito. Es una técnica de geoingeniería para el almacenamiento duradero de dióxido de carbono . La captura de carbono es problemática porque sus metodologías (“biochar”, depósitos para la preservación forestal, etc) dependen de un modelo continuo del uso de las tierras para un área particular, como por ejemplo, que la tierra donde se haya enterrado el “biochar” nunca podrá ser cultivada o urbanizada. También crea una excusa para los que contaminan para seguir contaminando en el lugar de origen, argumentando que sus emisiones se capturan en otros lugares.
• Descrito como la mayor ‘usurpación potencial más grande de tierras de todos los tiempos’, el Reducing Emissions from Deforestation and Forest Degradation (REDD) sitúa a los bosques (y las tierras agrícolas, si consideramos REDD +) directamente en el mercado del carbono para el beneficio de las multinacionales. REDD permite a las multinacionales contaminantes comprar su exención de reducir emisiones de gas en el lugar de origen mediante una supuesta conservación de los bosques. Sin embargo, de acuerdo con la Indigenous Environmental Network, REDD está lleno de “incentivos perversos” para convertir bosques naturales en monocultivos de árboles aumentando de ese modo la deforestación.
Hasta ahora, un bajo porcentaje de los fondos de CDM ha ido a prácticas agrícolas (sin incluir la producción de energía derivada de biomasa residual), aunque este número está aumentando con la aprobación de nuevos métodos de captura de carbono y compensación. De acuerdo con la página web de UNFCCC, la agricultura representa solo el 2,58 por ciento de los métodos aprobados, mientras que la forestación y reforestación representan el 9,28 por ciento de los métodos aprobados. Esto no incluye métodos para la producción de energía que usan biomasa y biomasa residual. La agricultura representa un 4,38 por ciento (128 proyectos) de todos los proyectos registrados de la CDM mientras que la forestación y la reforestación representa el 0.58 por ciento (17 proyectos). La mayoría de métodos agrícolas se centran en reducir las emisiones derivadas de las instalaciones de producción de carne, en oposición a requerir modelos más sostenibles de producción (por ejemplo, de pequeña escala) que generarían menos emisiones.
Agrocombustibles:
Hasta hace poco, la producción de agrocombustibles no era un método aprobado por el CDM, pero sí lo era la producción de energía derivada de los residuos de biomasa. Por ejemplo, Cabrera Central Energética Açucar e Álcool Ltda., una filial brasileña de Archer Daniels Midland y Grupo Cabrera, tiene un proyecto CDM para generar electricidad a partir de los restos de bagazo de su planta de etanol. En octubre del 2009, la Junta de CDM aprobó un método para la producción de biodiesel en plantaciones dedicadas en “tierras degradadas o degradantes”, una definición tan amplia que incluye la mayoría de tierras agrícolas y mucho ecosistemas naturales. Esta metodología permite a los grandes productores de agrocombustible, como Archer Daniels Midland y Cargill beneficiarse directamente de los bonos de carbono por primera vez. Cualquier sistema CDM que implique la producción de energía a partir de los cultivos, ya sean residuos de desecho o producción de agrocombustibles, beneficiará a la biotecnología de las multinacionales, que consiste en microorganismos y enzimas genéticamente manipulados con el fin de reducir la energía necesaria para descomponer la biomasa en agrocombustibles, aumentar la biomasa de celulosa derivada de los residuos agrícolas (ej, rastrojos de cereal, eucaliptos) y cambiar la proporción de lignina en la biomasa para que pueda ser convertida en productos como agrocombustibles y bioplásticos. De acuerdo con Syngenta, “la agricultura tiene el potencial de reducir los gases de efecto invernadero mediante la producción de cultivos para biocombustibles, un alternativa de bajo-carbono a los combustibles fósiles.” Cualquier proyecto CDM que favorezca la obtención de bonos de carbono a los productores industriales de agrocombustibles, ya sea derivados de los residuos agrícolas o de la producción directa de agrocombustibles, presenta serias amenazas a los agricultores, pues fomenta la adquisición de tierras y la especulación por parte de inversores extranjeros, la degradación de las tierras, la biodiversidad y el agua debido al uso de productos químicos y la producción de monocultivos, y además aumenta el poder del mercado de las multinacionales.
Cultivos genéticamente modificados, “adaptados al clima”: Los cultivos que están genéticamente diseñados para resistir la sequía, el calor, el frío, las inundaciones o la sal, están siendo promovidos por la biotecnología de las multinacionales como elementos necesarios para adaptarse al cambio climático. El avance de los cultivos modificados genéticamente y “adaptados al clima” amenazan todavía más los derechos de los campesinos a la agrobiodiversidad de las semillas mediante las reclamaciones de patentes y la contaminación genética. De acuerdo con el ETC Group, bajo el disfraz de los cultivos desarrollados “adaptados al clima”, las multinacionales están presionando a los gobiernos para que permitan lo que podría convertirse en la mayor y más peligrosa reclamación de patentes en la historia de la propiedad intelectual. El objetivo de la plantación ya no es sólo alimentar a las personas, sino maximizar la biomasa para crear agrocombustibles, bioplásticos,… Sólo seis corporaciones (DuPont, BASF, Monsanto, Syngenta, Bayer y Dow) controlan el 77 por ciento de las 262 familias de patentes (tanto patentes emitidas como aplicaciones) publicadas entre junio 2008 y junio 2010 para cultivos “adaptados al clima”. Tres compañías – DuPont, BASF y Monsanto – cuentan con el 66 por ciento.
El sector público sólo tiene un 9 por ciento. Sólo DuPont tiene el 44 por ciento, mientras que Monsanto cuenta con el 4 por ciento.
Agricultura química sin labranza: Aunque aún no está aprobada, otra metodología en la línea de captura de carbono es la agricultura química sin labranza (también llamada «conservación» y «agricultura sostenible» por las multinacionales), basada en la premisa de que las emisiones de la agricultura pueden ser reducidas al no labrar la tierra, capturando así el dióxido de carbono. Monsanto ha estado presionando desde 1998 para que la agricultura sin labranza sea una metodología CDM aprobada, y ya ha sido reconocida por el Chicago Climate Exchange. Monsanto afirma que sus cultivos OGM Roundup Ready ayudan a luchar contra el cambio climático, ya que pueden ser cultivados sin labrar las malas hierbas de la tierra, en lugar de acabar con ellas con cantidades masivas de herbicida Roundup (glifosato). Si los agricultores que producen cultivos Roundup-Ready pueden acceder a bonos de compensación de la metodología de no-labranza, las ventas de semillas de Monsanto y de sus productos químicos aumentarán, pues los países animarán a los grandes agricultores a plantar los cultivos Roundup Ready, para optar a los bonos de carbono. En 2009, Monsanto obtuvo el premio Angry Mermaid por sus esfuerzos de presión para que la agricultura química sin labranza y las plantaciones de soja Roundup Ready fueran aprobadas por la UNFCCC. Si la agricultura química sin labranza es aprobada, se incrementarán los monocultivos industriales y el consecuente uso de cultivos transgénicos y productos químicos tóxicos, desplazando a las comunidades rurales más lejos de sus tierras, concentrando las tierras en manos de empresas multinacionales, y envenenando el agua y los cuerpos humanos con los productos químicos.
Inoculación de nitrógeno de las leguminosas: En julio de 2009, la UNFCCC aprobó la primera metodología de producción agrícola para CDM, basada en una tecnología que elimina el uso de fertilizantes de nitrógeno en las leguminosas mediante el tratamiento de semillas con bacterias fijadoras de nitrógeno. La metodología fue creada para ser usada en los monocultivos industriales de la soja y de las rotaciones del maíz, y se basa en una tecnología patentada por Becker Underwood, Inc., que desarrolló la tecnología con Amson Technology LLC GmbH y Perspectives GmbH para un proyecto CDM en Brasil. En 2008, Monsanto entró en una alianza con Becker Underwood para desarrollar tecnologías para el tratamiento de semillas patentadas de maíz, soja y algodón. Monsanto ha estado ofreciendo tratamientos de fertilización nitrogenada de semillas desde el año 2009 y todas las semillas de soja Roundup Ready 2 Yield son tratadas con estas bacterias fijadoras de nitrógeno. Monsanto está trabajando para tener tratamientos de semillas para algodón Deltapine y para el maíz SmartStax. Esta metodología es problemática, dado que fomenta la expansión de la producción de monocultivos de OGMs, con uso intensivo de productos químicos, controlados por las empresas multinacionales.
Plantaciones industriales de árboles: Con el pretexto de «forestación y reforestación”, las plantaciones industriales de árboles para la producción de agrocombustibles celulósicos y para la producción de bioplásticos están siendo promovidas como» bosques «que secuestrar el carbono. Sin embargo, las plantaciones no son bosques, y los bosques nativos capturan mucho más dióxido de carbono que las plantaciones de árboles, y generan biodiversidad, en oposición a los desiertos verdes de las plantaciones de eucalipto. Mientras las empresas forestales y de papel, como Stora Enso, Weyerhaeuser, Votarantim y Kimberly Clark tengan acceso a los bonos de carbono mediante las metodologías de forestación y reforestación, las plantaciones se expandirán, amenazando a los territorios de las comunidades indígenas y tradicionales, y además amenazando los bosques y la biodiversidad y sus sistemas de agua. Las actuales propuestas de REDD ayudarían a la industria de los agrocombustibles mediante la subvención de la conversión de bosques primarios en plantaciones industriales de palma de aceite y otros árboles y plantaciones de arbustos (incluyendo jatropha) bajo el disfraz de «bosques».
Presas hidroeléctricas: las presas hidroeléctricas están siendo promovidas por la energía limpia de UNFCCC. Sin embargo, las presas son fuentes importantes de emisiones de gases de efecto invernadero. Por otra parte, inundan territorios, tierras y bosques que capturan carbono. Las presas hidroeléctricas representan una amenaza importante para los campesinos y los territorios de los pueblos indígenas y para la pesca, y también pueden fomentar el establecimiento – y la degradación – de los bosques. Por ejemplo, a través de su participación en Ecosecurities, Cargill ayudó a financiar una serie de presas hidroeléctricas en varios estados amazónicos de Brasil, precisamente en las áreas donde el cultivo de soja se expande enormemente. El cálculo de carbono de Ecosecurities no tiene en cuenta la deforestación causada por su posterior asentamiento de la región, que puede haber sido alentada por la construcción de las presas. Casi todos los proyectos de presas financiadas por Ecosecurities en Brasil se encuentran cerca de las principales carreteras que conectan a los productores de soja y carne relacionada con los procesadores y las instalaciones de Cargill de exportación de soja en el río Amazonas.
Captura de metano de las granjas industriales: ADM y Cargill acceden a los bonos del CDM con proyectos para la reducción de emisiones a través de la gestión del estiércol del ganado (incluyendo la producción de biogás a partir de estiércol de cerdo), la generación de calor a partir de los efluentes del molino de aceite de palma, y el uso de residuos agrícolas para producir agrocombustibles (rastrojo de maíz y bagazo de caña de azúcar). En 2007, el 90% de todos los proyectos aprobados del CDM en Malasia beneficiaron a las empresas de aceite de palma. En México, la mitad de todos los proyectos del CDM, incluyen las explotaciones porcinas. Cargill y ADM controlan el 50% de la producción de aceite de palma en Asia, y Cargill es un agente importante en la producción de carne de cerdo mexicana.
Biochar (Biocarbón): Los defensores del biocarbón argumentan que la introducción de carbón vegetal en las tierras va a crear depósitos confiables y permanentes de carbono, así como hacer que los suelos sean más fértiles y retengan mejor el agua. Las propuestas implican la plantación de 500 millones a cerca de mil millones de hectáreas de plantaciones industriales de árboles, quemarlos, y enterrar el carbón resultante en el suelo. Tal vez con la excepción de los agrocombustibles, la captura de carbono en la tierra para obtener compensaciones de carbono, a través del biocarbón y la agricultura química sin labranza, se presentan como el mayor potencial para la captura de carbono entre los métodos de la agricultura, a condición de que se levante su exclusión del CDM. Según Biofuelwatch, todavía no se ha aprobado ninguna metodología biochar en la junta del CDM, pero sin embargo, se aprobó una metodología de carbón vegetal que fácilmente podría ser adaptada para el biochar. La metodología propuesta fue iniciada por Plantar, una empresa con extensas plantaciones de eucalipto en Minas Gerais, Brasil. Es particularmente preocupante cómo Arborgen, que desarrolla eucaliptos genéticamente modificados, se beneficiaría de una metodología aprobada para el biocarbón.
Una mirada más de cerca sobre cómo las empresas multinacionales se están beneficiando del mercado de carbono
El comercio de carbono es actualmente el mercado de materias primas de más rápido crecimiento en la tierra. Desde 2005 ha habido transacciones de carbono por más de $ 300 mil millones. Las instituciones financieras más grandes del mundo, como Goldman Sachs, Barclays y Citibank, tiene ahora departamentos de comercio de carbono; los comerciantes que antes especulaban con el petróleo y el gas están apostando ahora por los efectos secundarios más graves de nuestra economía basada en combustibles fósiles. Durante la próxima década, si el presidente Obama y otros partidarios pueden establecer un sistema de comercio de derechos de emisión en Estados Unidos, la demanda de créditos de carbono podría explotar en un mercado de US $ 2 a $ 3 billones de dólares. Los especuladores de carbono están financiados en gran medida o son propiedad de empresas multinacionales, especialmente las compañías financieras como JP Morgan Chase, que posee el promotor más grande de carbono en el mundo, EcoSecurities. Goldman Sachs tiene un interés significativo en el mayor promotor con sede en EE.UU., Blue Source, y Cantor Fitzgerald posee CantorCO2, otro agente importante. Otros grandes inversores en este sector son BHP Billiton, la mayor empresa minera del mundo, y la empresa gigante de productos agrícolas Cargill, que es ahora uno de los principales desarrolladores de proyectos de carbono. A través de su filial Green Hercules Trading Limited, Cargill, una de las más grandes corporaciones privadas del mundo y un importante comerciante y procesador de grano, azúcar, carnes y otros productos agrícolas (y un contaminador de gases de efecto invernadero), ya tiene su propia empresa de comercio de carbono y está entre los diez mayores comerciantes de carbono del mundo. Hasta diciembre de 2009, Cargill poseía un 9 por ciento de Ecosecurities. El mercado de carbono es, en esencia, un elaborados juego de trileros, un acto de desaparición que sirve bien a los intereses inmediatos de los gobiernos del mundo y las empresas transnacionales, pero no para afrontar los retos de nuestra inminente crisis ambiental.
De Cochabamba a Cancún: Los pequeños agricultores rechazan las soluciones falsas y exigen soluciones reales para salvar el clima
En respuesta a las negociaciones fallidas de la UNFCCC en Copenhague en diciembre de 2009, en abril del 2010 el gobierno de Bolivia albergó la Conferencia de los Pueblos del Mundo sobre Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra en la ciudad andina de Cochabamba. Treinta mil personas asistieron a la conferencia y propusieron soluciones reales al cambio climático:
• Reducir las emisiones en su lugar de origen: No al mercado de derechos de emisión y no a los esquemas de compensaciones. Los países y las empresas tienen que hacerse responsables de sus emisiones.
• Agricultura campesina sostenible. Las políticas para la agricultura sostenible de pequeña escala pueden no sólo reducir las emisiones de la agricultura industrial, sino que de hecho contribuyen a la captura del carbono en la tierra, preservando los bosques nativos y la biodiversidad.
• Reducir las emisiones más del 50% para el 2017.
• Derechos de la Madre Tierra. La humanidad necesita re-adaptarse a sí misma a la naturaleza y al planeta mediante un nuevo respeto y relación con la Madre Tierra.
• Total respeto por los derechos humanos y por los derechos de los pueblos indígenas y los emigrantes climáticos. El respeto por los pueblos indígenas y sus territorios puede contribuir a la protección de los bosques nativos, algo fundamental para estabilizar el clima.
• Formación de un Tribunal Internacional para la Justicia Climática.
• No a los nuevos mercados de carbono.
• 6% del PIB de los países desarrollados debe ser para financiar las acciones contra el cambio climático en los países en vías de desarrollo.
• Eliminar las barreras de propiedad intelectual que faciliten la transferencia de tecnologías.
• No a la mercantilización de los bosques .