Viernes 21 de Septiembre de 2012
Estimados Señores y Señoras,
Escribo para expresar mi profunda indignación y requerir medidas urgentes por la violencia física y psicológica que las familias de trabajadores rurales Sin Tierra del Acampamento Gregório Bezerra vienen sufriendo hace más de un año por parte del representante de la Hacienda Serro Azul, Sr. Luiz Reis y de la Policía Militar Roberto José de Costa Lima.
La hacienda Serro Azul, ubicada en el departamento de Altinho, estado de Pernambuco, tiene cerca de 1.000 hectáreas y es señalada por los trabajadores rurales Sin Tierra como latifundio que no cumple su función social, violando el art. 186 de la Constitución de la República Federativa del Brasil. Por ese motivo los trabajadores rurales reivindican su expropiación y asignación al Programa Nacional de Reforma Agraria, como determina la legislación brasilera.
Como forma legítima de lucha por sus derechos constitucionales, las familias ocuparon por primera vez la hacienda Serro Azul el día 18 de abril de 2011. Desde entonces esas familias vienen sufriendo amenazas, intimidaciones y violencia física permanente por parte del representante de la hacienda, Sr. Luiz Reis, y por matones contratados por ellos y liderados por el policía militar Roberto José da Costa Lima.
Entre los diversos actos de violencia cometidos destacamos: 1. Disparos de armas de fuego en dirección al acampamento en mitad de la noche. Dos agricultoras – Josefa María de Belquior e Josefa Edijane de Lima Bezerra – y un adolescente, Janaílson José da Silva, de 15 años, fueron alcanzados por esos disparos; 2. Incursiones de hombres armados a caballo al acampamento, inclusive apuntando armas hacia los trabajadores rurales y tirando los caballos sobre ellos. En una de esas ocasiones el agricultor João Domingos Lins Filho fue casi pisoteado por un caballo cuando descansaba frente a su carpa; 3. Arribo de hombres armados a los trabajadores rurales acampados en las entradas que llevan al acampamento, dirigiendo graves amenazas con disparos de armas de fuego, como pasó el 29 de mayo de 2012, cuando el adolescente Edvanilson Pedro da Silva tuvo un arma apuntada a su cabeza por el Sr. Luiz Reis, cuando salía de la Iglesia ubicada en el departamento de Altinho; 4. Agresiones físicas a los trabajadores, como en el caso de la agricultora Josefa Maria de Belquior, que fue agredida en el cuello por el Sr. Luis Reis y en el caso de la golpiza al agricultor Eraldo Alves da Silva, que tuvo dos costillas quebradas gracias a los golpes propinados por el Sr. Luis Reis mientras el policía militar Roberto José da Costa Lima apuntaba un arma a su cabeza.
Sabemos que todos estos casos ya fueron ampliamente denunciados a las autoridades públicas brasileñas, que hasta el momento no tomaron las actitudes necesarias para salvaguardar la vida de los trabajadores y castigar a los responsables por los crímenes. Tenemos aún tristes informaciones de la complicidad de algunas autoridades como la violencia, tanto dentro del sistema judicial local como en el aparato policial. De la misma forma, el Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria (INCRA) no adoptó las medidas determinadas por ley para investigar la denuncia de los trabajadores rurales en cuanto al incumplimiento de la función social en la propiedad denominada Fazenda Serro Azul.
Así, al perdurar esta situación de omisión del Estado brasileiro las familias de trabajadores rurales no superaran su estado de grave vulnerabilidad socio-económica, pues no tienen una perspectiva concreta de obtener acceso a la tierra. Por otro lado la situación de impunidad relacionada a las violencias practicadas contra los trabajadores rurales podrá desencadenar en graves situaciones de atentados a la vida, como ya viene aconteciendo.
De ese modo, pido que sean tomadas medidas inmediatas en el sentido de: A) Terminar inmediatamente con la situación de violencia física y moral contra trabajadores rurales que luchan por acceso a derechos humanos; B) investigar y castigar a los agentes privados y del Estado responsables por cometer graves crímenes contra los trabajadores rurales; C) viabilizar a los trabajadores rurales acceso a la tierra que les garantiza vida digna, único modo eficaz de evitar definitivamente los conflictos sociales
Espero que los señores tomen las debidas medidas y protejan los derechos y la vida de las familias Sin Tierra.
Lea la carta: http://act.grassrootsonline.org/p/dia/action/public/?action_KEY=11683&tag=twitter