En nuestra petición al Gobierno de Chile en el año 2015, señalamos la necesidad de abogar por construir un diálogo con el hermano Estado Plurinacional de Bolivia, y abundamos en los fundamentos para propiciar una relación de paz e integración entre los Pueblos Latinoamericanos, de Sudamérica y particularmente de buena vecindad entre Bolivia, Chile y Perú.
Las relaciones internacionales actuales nos exigen reforzar la voluntad pacífica de los Pueblos, después de casi una década de fuertes guerras fratricidas. Más aún la necesidad de reforzar la voluntad unitaria por preservar y mejorar las condiciones de desarrollo, ante los fuertes desafíos que nos generan las políticas neoliberales en desmedro de las condiciones materiales de nuestros pueblos.
Ante la próxima Ronda de los Alegatos en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, manifestamos nuestra voluntad que éstos se desarrollen con la mayor normalidad y cordialidad, apoyados por los respectivos juristas internacionales con que cada país se ha asesorado y/o representado.
Esperamos que estos alegatos orales enriquezcan nuestro acervo cultural, reponiendo nuestras historias comunes desde los tiempos ancestrales, de los Siglos XIX y XX, y los presentes días.
Abogamos porque en esta Ronda se genere un acercamiento entre los Gobiernos de ambos países, se apronten a escuchar el veredicto del Tribunal Internacional y, especialmente, se escuche el clamor de nuestros pueblos, de generar condiciones de justicia histórica, fortaleciendo la paz, vecindad e integración de nuestras Naciones.
Globalicemos la Lucha por la Paz y la Integración de nuestros Pueblos.
Globalicemos la Esperanza.
Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo/Vía Campesina Chile.
Santiago, marzo de 2018