21 de setiembre de 2013
En las últimas semanas fos (Organización solidaridad Norte-Sur del movimiento socialista en Flandes) ha denunciado ya varias veces la detención injusta de Huber Ballesteros, lider sindical de Colombia, vicepresidente de FENSUAGRO.
Desgraciadamente Huber sigue encarcelado hasta el día de hoy. Esta semana escribió una carta abierta. Huber no ha perdido la fe y quiere seguir luchando desde la cárcel. Agradece todas las manifestaciones de solidaridad que ha recibido.
CARTA ABIERTA
Bogotá Colombia, septiembre 15 de 2013.
Cárcel Nacional La Picota, Patio 11
Compañeros y Compañeras.
Fraternal saludo:
Sería difícil responder a todas las manifestaciones de solidaridad que he recibido en estos días tan duros para mí, para mi familia y las organizaciones sociales y políticas a las cuales pertenezco.
Con un poco de tiempo y cuando disponga de papel, iré respondiendo las cartas, las notas y todas las manifestaciones de afecto y solidaridad que he recibido. Debo confesar, que todas ellas, me han conmovido hasta las lágrimas; afuera el ajetreo, las responsabilidades, que unos y otros asumimos para sacar adelante las tareas, nos hacen olvidar o dejar de lado nuestra parte humana, el afecto, el compañerismo o por lo menos, eso me pasa a mí; pero cuando asoman las dificultades y se siente como en mi caso, todo el afecto y el cariño que muchos y muchas sienten por uno, necesariamente se llega a la conclusión, que los años de sacrificio, valieron la pena.
Hoy, a pesar de las circunstancias, no me siento ni derrotado, ni relevado de mis responsabilidades como luchador social y político del movimiento popular en Colombia, en América y el mundo; todo lo contrario, hoy tengo una responsabilidad que se suma a las que he tenido y es la de luchar ahora por los presos políticos y todos los encarcelados de este país, siendo uno de ellos.
Desde ésta, mi nueva trinchera de lucha, trabajaré día y noche, por los campesinos, los indígenas, las negritudes, los trabajadores de todos los sectores populares, aún en medio de los condiciones en que me encuentro, situación a la que he llegado, no por corrupto, no por traidor a mi clase y a mi pueblo, sino todo lo contrario, por obrar conforme a mis principios y convicciones.
Desde aquí seguiré trabajando y algún día saldré para vincularme de nuevo a la protesta, al paro, a la huelga, a la movilización social; herramienta poderosa con la que se forjan los cambios de una sociedad. Soy un convencido de eso, la lucha social y política en todas sus manifestaciones, logrará más temprano que tarde, poner fin a la horrible noche y alumbrará, para los desposeídos, para los desterrados, para los prisioneros, la luz de la justicia, de la igualdad y la paz; seremos una nación soberana, democrática y con justicia social. Los apátridas que nos han gobernado no pasarán; la unidad de los demócratas y los patriotas, que somos la mayoría, pondrá fin al reinado de la traición, la desigualdad y la injusticia.
El momento político, nos exige grandeza, desprendimiento, por alcanzar la unidad. Hemos dado pasos muy importantes en esa dirección, el paro agrario y popular, la reciente reunión agraria y popular que convocó a la gran Cumbre en el mes de octubre, así lo indica, vamos por buen camino, debemos seguir por él.
Agradezco a todas y a todos, a las organizaciones campesinas, indígenas, de negritudes, a la CUT, a las organizaciones internacionales, a los amigos y amigas, a quienes de una u otra manera, han mostrado su indignación por mi detención y han expresado su solidaridad, reciban un gran abrazo y aquí estoy como uno más de ustedes, luchando por un mejor país, por un país para los pobres.
Atentamente,
HUBER DE JESUS BALLESTEROS
Preso Político