Boletín Tierra marzo 2021

Desde la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo – CLOC-Vía Campesina te compartimos la primera edición del año 2021 de nuestra revista digital Boletín Tierra.

En esta edición marzo 2021 compartimos las acciones de las organizaciones miembros y aliados de CLOC-LVC en el Dia Internacional de la Mujer Trabajadora, 8 de marzo día de conmemoración a esas mujeres luchadoras y de levantar la voz para seguir promoviendo nuestro feminismo campesino y popular.

Sigamos denunciando y movilizando conciencias, presionando para que los estados se comprometan con las luchas históricas de las mujeres de los campos y las ciudades.

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Boletín Tierra Diciembre 2020

Desde la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo – CLOC-Vía Campesina te compartimos la edición diciembre 2020 de nuestra revista digital Boletín Tierra.

En esta edición hacemos un recuento de las acciones, retos, desafíos y logros de todas las organizaciones de la CLOC en este año 2020.

Además, también contiene noticias de las regiones que a pesar de las dificultades de este año los procesos de producción, formación y lucha no se han detenido.

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El Campesinado de la Región Caribe una Mirada Ante el Covid 19

El sector agropecuario tiene una gran importancia social y económica en el Caribe por lo que su impacto durante la pandemia ha quedado demostrado. A pesar de los desafíos que ha traído consigo el impacto del COVID 19, los campesinos, agricultores, trabajadores agrícolas, recolectores y pescadores han mantenido su gesta de ser trabajadores esenciales proveyendo alimentos sanos a los pueblos del Caribe. No obstante,  los gobiernos en vez de ofrecer beneficios y oportunidades de acompañamiento a quienes producen los alimentos en sus países, han preferido incrementar las importaciones de alimentos a favor del capital dejando a los trabajadores de la tierra aún más vulnerables.

Un conjunto de factores limita la agricultura campesina en países como República Dominicana, Puerto Rico y Haití ya que a pesar de la actividad constante de los campesinos, agricultores, y trabajadores agrícolas en alimentar al pueblo especialmente durante este momento de extrema necesidad, el Estado por otro lado se ha caracterizado históricamente por limitar el acceso a la tierra, el agua, las semillas, el crédito, la tecnología, el conocimiento y la vinculación con los mercados.

En los últimos años la capacidad productiva del sector agropecuario se ha visto amenazada por el desamparo de los gobiernos, el aumento de los costos de producción que se convierten en una baja rentabilidad de los cultivos, la falta de mercados y de financiamientos, todo ello resultado de la política económica de gobiernos que han privilegiado el libre comercio y como resultado se importan productos que campesinos producen localmente y que los obligan a competir, llevando a la quiebra a los pequeños y medianos productores que han sido abandonados a su suerte, lo cual nos plantea la necesidad de cambiar el modelo económico de uno que extrae de los bienes comunes naturales de los pueblos como si no hubieran límites mientras explota toda forma de vida por otro que ponga énfasis en el desarrollo rural, costero y urbano integral, que promueva justicia, equidad, participación ciudadana, transparencia, y priorice a las personas y al medioambiente por encima del capital.

A esto se suman las amenazas y vulnerabilidad a los efectos del cambio climático que desde el sector agropecuario lo sentimos muy de cerca con el impacto que dejan huracanes, tormentas tropicales, sequías, plagas, enfermedades epidemiológicas y hasta terremotos. Es por esto que la experiencia de Puerto Rico nos ha enseñado a trabajar desde el enfoque de la Recuperación Justa reconociendo que estos eventos extremos climáticos afectan a todos pero no a todos por igual y que además la recuperación por la que trabajamos es aquella que se realiza en apoyo mutuo, solidaridad, autogestión, organización e internacionalismo a través del esfuerzo propio, la colaboración y las alianzas.

La agricultura y la ganadería representan la fuerza laboral de más importancia en estos territorios teniendo más visibilización en Cuba por el aporte al país, sus campesinos, además de los aportes a los servicios ambientales fundamentalmente vinculados a la protección de los recursos hídricos: agua potable, agua para regadío y energía eléctrica.

La región caribeña con la excepción de Cuba se ha caracterizado en que a pesar de los aportes de los pequeños y medianos productores agropecuarios a la economía, la zona rural sigue siendo la que padece mayor exclusión manteniendo las desventajas en el acceso a los servicios públicos básicos como salud, educación, agua potable, comunicación terrestre y tecnológica y siguen siendo lo que produce un aumento en los niveles de pobreza. Ante este desafío, las organizaciones de la CLOC-Vía Campesina en la región se han mantenido activas construyendo poder, organizando iniciativas educativas, de apoyo y acompañamiento a familias campesinas.

Muchas de las áreas rurales en el Caribe han ido disminuyendo su población y actividad agrícola por el abandono del Estado a sus necesidades y los servicios esenciales que proveen. Los jóvenes, las mujeres, los envejecientes y las personas que no se conforman con una identidad de género binaria han sido de las personas más afectadas y muchos han tenido que emigrar a las periferias de ciudades teniendo que incursionar en trabajos informales de todo tipo para poder subsistir.

En Haití, República Dominicana y Puerto Rico, desde los cimientos de la familia ha sufrido una desgarradora desintegración y ha sucumbido víctima de la violencia intrafamiliar y de género, de las drogas y la inseguridad ciudadana, siendo las mujeres las que han llevado la peor parte de esta problemática con los maltratos, los femicidios, los embarazos en adolescentes, la doble carga de trabajo y el casamiento a temprana edad.

Con esto también se agrava la falta de oportunidades a la juventud, que viene perdiendo las esperanzas y solo aspiran a dejar su patria y emigrar hacia un futuro incierto en sociedades que están caracterizadas por la explotación, la xenofobia y el racismo que repudiamos y que tuvo su más reciente y desgarradora expresión con el asesinato del afrodescendiente George Floyd en Minneapolis, EEUU entre otros casos que ocurren a diario también en América, Europa y otras partes del mundo.

En Haití, un problema que enfrenta la población es la falta de agua potable y para el consumo humano. Esto se vuelve una dificultad más fuerte ante el contexto de la pandemia que acontece.

En los pueblos del Caribe la población carece de información veraz del verdadero número de infectados y quienes son para poder mantener el control personal y social oportuno para evitar ser afectada. Además, se han suministrado pruebas defectuosas que inducen a falsos resultados poniendo en un riesgo mayor a la población ya vulnerable. Actualmente el número de casos ha ido en alza y el número de contagiados y muertos en aumento.

Las medidas tomadas por los gobiernos no llegan a segmentos importantes de las poblaciones más vulnerables como son: sectores del campesinado, obreros agrícolas y de la construcción, y los trabajadores informales, entre otros.

Además, se agrega una situación económica a la población que tiene que invertir en la compra de materiales de protección lo que agrava su condición de escasez para poder obtener los artículos básicos de consumos. Debido a esta situación, las organizaciones de la CLOC-Vía Campesina del Caribe han distribuido equipo sanitario y de seguridad a sus bases, mantenido abiertos mercados campesinos, llevado a cabo orientaciones y talleres junto epidemiólogas y profesionales de la salud, y creado infográficas que orienten sobre las mejores prácticas en las fincas y parcelas de producción durante el contexto del COVID 19.

Los desafíos que hemos mencionado limitan en forma considerable las posibilidades de la población para QUEDARSE EN CASA PERO NO EN SILENCIO, así como también para una recuperación económica y social a mediano y largo plazo que sea equitativa y justa para las comunidades que han sido más golpeada. No obstante, a pesar de las necesidades que enfrentamos desde los pueblos del Caribe continuamos trabajando responsablemente y llevando a cabo las medidas sanitarias y salubristas necesarias para vivir con la pandemia.

Nuestras organizaciones estamos comprometidas a reaccionar y actuar responsablemente en procura de que nuestros países  den un salto hacia una verdadera Recuperación Justa, donde impere la justicia, los derechos ciudadanos y podamos construir una sociedad equitativa, democrática y libre, para lo cual debemos continuar convocándonos para profundizar el diálogo y las alianzas que permitan buscar caminos alternativos, recogiendo y demandando los planteamientos y necesidades de los distintos sectores populares y democráticos  de esta región.

Este momento es fundamental para fortalecer el internacionalismo y levantar nuestras banderas de lucha  las cuales implica  acciones tales como: a) campaña de acceso a tierras, suministro de semillas y beneficios agrícolas en coordinación con las organizaciones y las entidades responsables de la agricultura en los países caribeños, b) plan de reparación y construcción de caminos vecinales; infraestructuras de riego, incluyendo perforación de pozos, instalación y reparación de electrobombas; construir reservorios, canales de riego, orientado a mejorar la producción, elevar la productividad y eficientar el recurso agua, c) en el contexto del COVID 19 constituir espacios o comités de prevención y apoyo a nivel provincial y comunitario, incorporando a las organizaciones campesinas y otras de la sociedad civil, d) establecer un programa de compra de producción agropecuaria a pequeños y medianos productores para garantizar abastecer los mercados y vender a precios justos; suplir las compras públicas que demanden las instituciones y disminuir la especulación de intermediarios, e) velar por la puesta en ejecución de los Planes Nacionales de Agricultura Familiar donde se garantice la inversión y planificación de la producción nacional con la participación del campesinado, desde una propuesta agroecológica y de soberanía alimentaria, f) campaña de Recuperación Justa y apoyo mutuo entre los pueblos del Caribe ante los retos del cambio climático, g) mantener la coordinación de actividades alrededor de los días de acción de la CLOC y La Vía Campesina Internacional, h) mantener los esfuerzos educativos a través de las Brigadas Agroecológicas y de Apoyo Mutuo, las Escuelas Agroecológicas Campesinas, los Institutos Agroecológicos Latinoamericanos y la Metodología Campesino a Campesino, i) e Incentivar la producción en la población agrícola y pecuaria en las diferentes zonas que garanticen la soberanía alimentaria de las familias campesinas de las comunidades, pueblos y provincias.

Por último, desde la Región Caribe reafirmamos los siguientes puntos:

  1. Garantizar el respeto pleno a la igualdad de género, los derechos fundamentales de toda la población y de una vida libre de violencia y de inseguridades.
  2. Destinar mayores recursos para atender a la población más empobrecida y afectada por el COVID-19, organizando para garantizar un ingreso digno para la sobrevivencia.
  3. La implementación de presupuestos gubernamentales de forma participativa, con enfoque de género y de derechos.
  4. Garantizar los derechos universales a la salud y educación de calidad en forma gratuita.
  5. Que sea frenada la corrupción que impera en la administración pública.
  6. Apoyo con orientación sobre protocolo de prevención y tratamiento del virus COVID 19.
  7. Levantar informaciones del estado de salud y condiciones sociales y económicas de las familias en especial las más vulnerables en el contexto rural.
  8. Entregar informaciones a la población en lenguaje accesible en forma masiva tanto física como electrónica.
  9. Destinar en forma directa y sin trabas de intermediación mayores recursos a pequeños negocios locales para su recuperación, protección y generación de empleo para la comunidad.
  10. Rescindir los contratos de tierra con los consorcios internacionales del agronegocio pudiendo ser integrada a una reforma agraria con programa de beneficios y acompañamiento que vaya en beneficio de los campesinos y campesinas de los países caribeños.

Balance regional Suramérica 2020-2021

Vivimos paralelamente crisis política, económica, social, ambiental, y ahora sanitaria. Y nos estamos proyectando a una crisis alimentaria que dependerá del tiempo que dure la pandemia y según los intereses de los gobiernos.

El almacenamiento, distribución y comercialización está en manos de las grandes superficies, fortalecidas desde los años 90 y los países han perdido el control total.

Teniendo en cuenta los ámbitos mencionados anteriormente, los siguientes desafíos son los que nos planteamos desde la CLOC-Vía Campesina

  • La reforma agraria como uno de los temas decisivos. Para combatir el hambre y el desempleo.
  • La producción de alimentos: la agroecología como la alternativa del agrotóxico y del veneno, alternativa fundamental para mejorar las condiciones de vida de la población.
  • Dominar la comunicación, la agitación de masas para cambiar los gobiernos.
  • El estudio como tarea fundamental para conocer la historia y dar un paso hacia el futuro.

La coordinación política de la región tuvo una dinámica permanente de reuniones mensuales, dando como resultado, las tareas en tiempo de crisis como las que estamos viviendo, destacamos la siguientes: preservar nuestras vidas y nuestras comunidades; iniciamos un proceso de organización de estudios virtuales, que son indispensables en este momento histórico que desafía nuestra creatividad, nuestra capacidad del uso de las tecnologías a nuestro favor para seguir resistiendo y fortaleciendo en las luchas, esperanzas y solidaridad.

Los plenarios fueron un espacio orgánico de formación, reflexión, información y orientación; manteniendo la mística y la articulación política-organizativa de la región. Quisimos que fuera un espacio para construir unidad de lectura y acción frente a la coyuntura internacional, regional y de pandemia.


Lar articulaciones jóvenes y mujeres vieron una oportunidad en las plataformas virtuales para encontrarse, formarse y avanzar, con una rigurosa periodicidad durante todo el año.

En cuanto a formación Tuvimos Jornadas virtuales de formación en 7 sesiones que profundizaron los temas de:

  1. Cuestión agraria, el campesinado y desafíos actuales,
    • La cuestión agraria, la tierra y los bienes de la naturaleza: los proyectos en disputa”
    • La actualidad de la Reforma Agraria como Proyecto estratégico – tareas y desafío
  2. Las nuevas estrategias del imperialismo
    • Las estrategias históricas de dominación del imperialismo en América Latina”
    • Las nuevas estrategias y doctrinas de dominación del Imperialismo en América Latina.
    • La geopolítica y la resistencia de los pueblos frente al imperialismo, escenario y perspectivas post pandemia
  3. Comunicaciones
    • Comunicación sistémica y geopolítica del poder hegemónico
    • Comunicación popular, semilla de lo comunitario por el buen vivir
    • Comunicación y desafíos en las organizaciones de la CLOC – LVC

Demostramos que las organizaciones pertenecientes a nuestra región tienen la fuerte convicción de no dejarse vencer ante las adversidades, transformando la metodología de nuestras luchas, siendo el reflejo de la consigna trabajo por La Vía Campesina “En casa, pero no en silencio”.

Se le dio la importancia adecuada a la formación para dirigentes base, trabajo que también se llevó de la mano con la articulación continental en el desarrollo de la V Escuela de Comunicación de la CLOC – LVC, de igual manera, junto con la articulación continental se impulsó las campañas de solidaridad con la convicción permanente de internacionalismo en la campaña “Pueblos Soberanos, Pueblos Solidarios”.

Para el 2021 y consientes que la pandemia seguirá en el planeta, los desafíos serán seguir fortaleciendo las articulaciones de jóvenes y mujeres, y de los países, enfrentar la criminalización que avanza en la región, la formación como un elemento de construcción constante y permanente.

La solidaridad como bandera antes los atropellos del imperialismo con los pueblos hermanos de la región y del continente, sabiendo así que la unidad es nuestra mayor fortaleza y el camino hacia un continente libre y soberano.

Procesos formativos de los Institutos Latinoamericanos de Agroecología en el contexto del COVID-19

Los distintos procesos de formación agroecológica desarrollados por los institutos y escuelas, han sido fruto del esfuerzo pedagógico de la CLOC-Vía Campesina en América Latina; mismas que tienen contextos, objetivos específicos y metodologías diversas, pero que comparten el hecho de ser instancias internacionales creadas para desarrollar la formación campesina, obrera, indígena y afrodescendiente.

Habiendo un recorrido de casi 15 años en esta aventura pedagógica en la agroecología, se ha acumulado mucha experiencia, se han obtenido grandes avances; lo cual exige hacer un balance sobre el contexto actual, encontrar espacios para evaluar lo que se ha construido identificando logros, lecciones aprendidas y encontrar algunas luces que sirvan para nuevos retos y desafíos, logrando mejorar los procesos de formación.

¿Cómo nos organizamos en el contexto de la Pandemia del Covid-19?

Debido a la paralización del mundo a consecuencia de la Pandemia, los IALAs y Escuelas de Agroecología también se sumaron a las nuevas formas de comunicación y formación virtual con herramientas que ya teníamos en uso y otras aplicaciones que surgieron bajo estas necesidades. Fue una experiencia importante en la cual fortalecimos nuestra capacidad de aprender nuevas formas y medios para la Organización y Formación constante independiente de las adversidades.

Fue un proceso novedoso para muchos y representó un desafío ante el cual tuvimos que plantearnos acciones de capacitación previa, pero además el aprendizaje en la marcha dio paso a esa experiencia. En este desafío no solamente fue una limitante la falta de experiencia, sino la realidad territorial con la falta de acceso a internet y/o, carente mayormente de señal para la comunicación e incluso comunidades sin servicio de luz, la falta de equipos adecuados y realidades de lejanía desde donde provienen los y las jóvenes participantes de los procesos formativos.

Ciertamente los procesos actuales con las nuevas herramientas tecnológicas, niegan la convivencia con la gente que es el propósito de la formación liberadora que desde los IALAs se desarrollan y niegan el acercamiento al acervo cultural; el cultivar el ser como persona para la vida, el contexto lo ha trastocado. Sin embargo, es importante reconocer que vivimos nuevos tiempos históricos que requieren de replantear las estrategias de nuestras escuelas de agroecología sin perder el horizonte de nuestros principios de lucha de la CLOC-Vía Campesina.

En términos generales, ha sido fortalecer los procesos de organización, adaptar los métodos de comunicación y de formación en cada IALA, considerando el contexto actual en el que vive el mundo, no solo por el COVID-19, sino también por fenómenos sociales, económicos, políticos y ambientales; que de una u otra forma afectan los procesos normales en la educación agroecológica.

En algunos IALA se continúa con los procesos de certificación académica, procesos que son de largo plazo, en algunos casos, y complejos, sin embargo, esto no ha detenido el funcionamiento de los IALA que viven estas circunstancias.

En la mayoría de los IALA se está trabajando en la elaboración de planes estratégicos adoptando medidas desde la práctica y la teoría, desde los métodos virtuales y presenciales que sirvan para fortalecer el liderazgo de las organizaciones y de los IALA, donde el año 2021 estará basado en nuevas experiencias, retos y desafíos para continuar los procesos de formación agroecológica.

La CLOC-Vía Campesina Centroamérica se fortalece en la crisis global

Este año nos llegó con la embestida migratoria de Estados Unidos. Con los corrales de trabajadores expulsados y los corrales de niños menores de edad retenidos (obligados a estar lejos de su familia en la USA) bajo el pretexto de reforzar los muros contra todos los latinos.

Expulsiones que fueron contra todos los países de Centroamérica desde Costa Rica hasta Guatemala.

Además, los gringos sancionaron a los gobiernos de Honduras, El Salvador y Guatemala por permitir las caravanas de migrantes a pesar de los fondos de ajustes económicos que ellos les financiaron. La CLOC-Vía Campesina de Centroamérica colocó dentro de las caravanas a sus miembros que fueron víctimas de los desalojos de sus tierras por las leyes de modernización agraria de Honduras y el no cumplimiento de los acuerdos de paz en Guatemala.

Nuestro mensaje fue hacer también de la migración, una trinchera de lucha por los derechos ciudadanos, agrarios y laborales.

La CLOC-Vía Campesina en Costa Rica entró en un programa de gobierno que con la reforma económica se revirtió a favor de los importadores de alimentos y exportadores, lanzando a la quiebra al productor nacional y al campesinado. Largas han sido las jornadas para retomar la política de protección a los derechos locales y territoriales, una lucha que ha tenido que sostenerse en medio de la pandemia.

La CLOC-Vía Campesina en Panamá apostó a una campaña de incidencia política para alcanzar programas económicos y sociales, rechazando la corrupción de gobiernos sobre los recursos públicos en medio de todo tipo de escándalos presupuestarios.

Los gobiernos de Guatemala y Honduras han entregado al ejército los programas agrarios y sometido a estado de sitio a muchos territorios en donde reina el narcotráfico.

El Gobierno de Unidad y Reconciliación Nacional de Nicaragua ha continuado su política de soberanía nacional para enfrentar la pandemia con el modelo de salud comunitaria y su política de soberanía alimentaria, con el programa de producción, distribución, consumo de alimentos sanos, mercados de cercanías, bonos productivos, hambre cero, patio saludable, sistema público de educación y salud, planes preventivos anti-desastres naturales, planes de vivienda popular, titulación de tierras para estabilizar a las familias y comunidades indígenas.

El año finalizó con dos terribles tormentas, ETA y IOTA, producto del cambio climático, que ha dejado muchas bases campesinas en Centroamérica con pérdidas inmensas en cultivos, animales, casas y caminos. Sin embargo, las organizaciones se levantan para contribuir a la reconstrucción, sobre todo para garantizar la producción de alimentos para el pueblo.

En este contexto, la CLOC-Vía Campesina Centroamérica ha dinamizado la solidaridad, la promoción de las mesas campesinas por país, la promoción de la solidaridad con la Revolución Cubana, la Revolución Bolivariana y la lucha del pueblo plurinacional de Bolivia, quien nos patrocinó la Declaración de los Derechos Campesinos en diciembre 2018 en la ONU.

Todo este sistema de movilización lo hemos sostenido gracias a la comunicación virtual y la formación de la juventud con las escuelas: Escuela Centroamericana de Formación de líderes y lideresas de la Francisco Morazán, Escuela Mesoamericana de Rescate a la Memoria Histórica, y El Instituto Agroecológico Latinoamericano (IALA) con sede en Santo Tomas, Chontales, Nicaragua.

Con esta plataforma de derechos campesinos, la articulación de las secretarias de la mujer; del movimiento feminista, campesino y popular, con la red agroecológica, el movimiento de jóvenes sindicalistas y trabajadores. Nos vinculamos a la Plataforma de la clase Obrera Anti-Imperialista (PCOA) como fuerza fogueada, organizada, altiva, luchadora, dispuesta a realizar las grandes tareas de la región y el mundo antes los desastres naturales producto de los abusos contaminantes del sistema capitalista industrial neoliberal.

Por tanto, desde aquí y ahora, les decimos que respaldamos la posición de La Vía Campesina ante la Cumbre Alimentaria que están imponiendo de manera ilegítima como un show de mercadeo en el que campesinos, pescadores, indígenas, pastores, habitantes de los bosques, trabajadores agrícolas, consumidores de la ciudad y zonas rurales. intentan desplazarnos de nuestra soberanía alimentaria y llevarnos al despotismo financiero de instituciones que en la ONU han perdido su integridad, imparcialidad, independencia y tratan de llevarnos al nepotismo imperialista a favor de diez familias transnacionales.

Gracias camaradas del Colectivo de Políticas Públicas de La Vía Campesina por la formulación del posicionamiento que nos da la luz estratégica del campesinado y los pueblos ante esa horrenda Cumbre Alimentaria 2021 que, sólo representa más fracaso de la revolución verde, o sea más de lo mismo que está recalentando el planeta.

En conclusión: desde este 2020 la CLOC-Vía Campesina Centroamérica se agiganta por encima de las pestes, los desastres naturales, la criminalización social y política y levantamos las campañas, las banderas, las consignas de los derechos campesinos y el buen vivir.

Y como dice Elsa Nury Martínez, CCI CLOC-Vía Campesina Sudamérica y miembro del Grupo Facilitador de La Vía Campesina, las prioridades para 2021 son:

  1. Nuestra funcionalidad orgánica.
  2. La fuerza política ideológica.
  3. La comunicación.
  4. Todas las alianzas: el neoliberalismo es el problema del conjunto de la sociedad.
  5. Criminalización: la cumbre alimentaria 2021, es criminalización.
  6. Visibilidad del ideario de la soberanía alimentaria, el buen vivir y los derechos campesinos

Entre la Pandemia y los Desastres Naturales; Pueblos en Resistencia.

El cierre del 2019 levantó una América Latina en llamas. Despertó la región austral de Chile, la patria de Allende, con protestas sin cuartel; suenan las calles de Bogotá,  en Bolivia aún se mantenía en las trincheras junto al pueblo de Túpac Amaru, y se niega a vivir el resurgimiento del neofascismo, porque la Abya Yala del cimarrón esclavo Makandal, hasta Bolívar, Morazán, San Martin, Artigas, Martí, Sandino y el Che, tejen esa Patria Grande, así nace aquel momento histórico el nuevo año 2020.

Las noticias corrieron junto a la pandemia COVID-19; llegando para quedarse y puso al desnudo al neoliberalismo que privatizó la salud y su desplazamiento tiene de rodillas al planeta, solo quienes promueven la salud comunitaria y colocan la mirada al campo de la producción de alimentos saludables podrán tener la resiliencia y mitigación del daño que vive la clase dominante incapaz de resiliencia y mitigación ante el avance de la pandemia de COVID-19, garantizando el abastecimiento de alimentos a la población en toda la cadena agroalimentaria para mitigar los efectos de la pandemia sobre la soberanía alimentaria para beneficiar a la población.

En el penúltimo mes del 2020, el istmo de Centroamérica, puente que une al sur y norte de América, se le sumó los efectos de dos huracanes en un lapso de 13 días, los huracanes ETA y IOTA, que fueron letales y sus daños aún son incalculables. Según noticias de la Redacción BBC News Mundo informa que este año tuvimos 13 huracanes y 30 tormentas que provocaron daños irreversibles y muchos de esos problemas son debido a la crisis climática provocada por el capitalismo salvaje.

Este año en medio de la pandemia y los desastres naturales, vimos a un pueblo rebelde e inconforme protestando en las calles de Guatemala, Honduras y El Salvador, en caminatas por buscar la ansiada paz en Colombia y contra la estigmatización y criminalización de la lucha social, un pueblo chileno mediante el estallido social lucha por conquistar su nueva constitución, ojalá incluya la autonomía del pueblo Mapuche, finalmente para un cierre de película en Bolivia se terminó la pesadilla y volvió la democracia popular.

El Grupo de Lima, no se explica el ejemplo de democracia electoral de Estados Unidos y los Neofascistas y Uribistas  están desconcertados por la derrota de su paradigmático presidente Donald Trump. Mientras en el Perú desfilan presidentes, Ecuador aún no se recupera por su abandono a la Revolución Ciudadana, pero si podemos saludar el abandono del Macrismo y la fuerza de México fuera del PRI y el PAN.

En las postrimerías del cierre de este inolvidable año desde la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo y La Vía Campesina, lanzamos la Campaña Pueblos Soberanos, Pueblos Solidarios llevando e internacionalismo a tres países que aún se mantienen en lucha y son atacados a través de múltiples formas de la agresión imperialista a los pueblos de Cuba, Venezuela y Nicaragua.

Hemos colocado en agenda la crisis por la pandemia la Campaña Volver al Campo para recuperar la resiliencia consiguiendo sistemas saludables con énfasis en la recuperación de la cultura ancestral y la innovación de la agroecología para enfriar al planeta e incremento de las cadenas agroalimentarias con mercados de cercanía, circuitos cortos y que el campo sea el lugar mejor habitable a través de la reforma agraria y la soberanía alimentaria. Desafíos que serán muy importantes en el 2021 debido al futuro incierto que nos hereda este año 2020.

Fortalecimos las escuelas de formación a través de plataformas virtuales, trabajamos la carta orgánica y la funcionabilidad  en todas las agendas de trabajo, desde el acompañamiento a políticas públicas, a la solidaridad e internacionalismo, la comunicación técnica y la política de alianzas más allá del acto presencial. Se le dio prioridad al Decenio de la Agricultura Familiar Campesina, a la declaración de los derechos campesinos y la búsqueda de aproximarnos a la agenda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la Agenda 2030.

El frente juvenil se levanta en su compromiso de posicionar las banderas de lucha en medio de una población joven, recientemente trabajan un documental sobre la acumulación de experiencias del movimiento.

En tanto la Articulación de Mujeres continúan con sus agendas construyendo en la distancia grandes momentos de formación y propuesta del feminismo campesino y popular en todos los frentes de la movilización social.

Los Institutos Agroecológicos (IALAs) es una iniciativa transformadora de campesinxs aplicando los instrumentos de la formación integral a través de una amplia gama de conocimientos, opciones y diseños de manejo a la biodiversidad funcional en los campos de cultivo. Estos centros de estudios refuerzan la resiliencia de los agroecosistemas para el desarrollo económico y social con vocación latinoamericana.

Desafíos para el 2021.

  1. Es el momento de potenciar la Agricultura Campesina a través de acciones de políticas públicas en todas las cadenas agroalimentarias para lograr la resiliencia por medio de la Reforma Agraria, Soberanía Alimentaria y la Agroecología.
  2. Fortalecer la unidad interna y la Solidaridad Internacional de acciones de lucha y otros movimientos de la clase trabajadora del campo y la ciudad.
  3. Fortalecer la organización de jóvenes y mujeres en toda la región.
  4. Formación política e ideológica y técnica en las Escuelas y los IALAs.
  5. Incentivar y hacer formación política e ideológica con los temas sobre la participación de a mujeres, la juventud y la diversidad.

Fausto Tórrez

Noviembre 2020.

Campañas por la defensa de la vida promovidas desde la CLOC en 2020

Este año, en pleno pandemia, la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo CLOC-Vía Campesina lanzó dos grandes campañas.

La primera campaña, Pueblos Soberanos, Pueblos Solidarios, busca fortalecer el internacionalismo con enfoque en tres países de la izquierda que recibieron un aumento de ataques en este año por el gobierno norteamericano: Cuba, Venezuela y Nicaragua.

La campaña se enfoca en dos áreas: primero, visibilizar los efectos de las agresiones imperialistas hacia los tres países en sus diferentes formatos incluyendo bloqueo económico, robo de dinero, invasión militar, y manipulación mediática, que tiene efectos tangibles que violan los derechos humanos y la soberanía de los tres países. Segundo, divulgar los logros impresionantes organizados desde cada Revolución (Cubana, Sandinista y Bolivariana) a pesar de estas agresiones. Esto incluye todo lo que han hecho para crear programas de salud gratis con las mejores cifras de recuperación de COVID-19 en el continente, apoyo para el sector campesino, el derecho a la educación y el liderazgo de las mujeres.

Luego del lanzamiento de la campaña, se ha ido ampliando la campaña con más países. Por ejemplo, se dio acompañamiento a las elecciones de Bolivia en noviembre, y en la región centroamericana después de los huracanes Eta y Iota.

La otra campaña, Volver al Campo, nace con el interés de visibilizar el campo y la producción de alimentos sanos a través de la agroecología. En este momento, hay que seguir construyendo resiliencia en el campo porque los alimentos sanos son la base para la salud de nuestras comunidades, algo que llegó a ser el centro de debate con la llegada de la pandemia.

En esta campaña, se hizo un diagnostico con una selección de organizaciones de la CLOC-Vía Campesina para entender cuáles son las dificultades que están enfrentando en su producción – por ejemplo, el encierre de la pandemia, la militarización y criminalización, la violencia contra las mujeres y niñas, y la falta de políticas públicas para apoyar a pequeños productores. Con este diagnóstico, se ha preparado un plan de emergencia para garantizar la producción de alimentos sanos por el sector campesino e incidir en diferentes espacios. El plan incluso fue presentado en la 36 Conferencia Regional de América Latina y el Caribe de la FAO.

La campaña Volver al Campo ha traído debates interesantes sobre el futuro del campo, su riqueza y cómo hacerlo más vivible especialmente para los jóvenes. Las ediciones 71 y 73 de Voz Campesina resumen estos debates con dirigentes de las organizaciones de la CLOC-Vía Campesina.

Mujeres de la CLOC finalizan este año 2020 fortalecidas

Conscientes del contexto que vive la población a nivel mundial con la pandemia del COVID-19, las mujeres: campesinas, indígenas, pescadoras, pastoras y asalariadas, afirmamos hoy más que nunca el valor de la lucha por la tierra y el territorio, por el rescate de los saberes ancestrales que permiten hacer frente a la pandemia y al perverso sistema capitalista que continúa saqueando nuestros bienes comunes con la complicidad de gobiernos lacayos que vulneran la vida de los pueblos del campo y principalmente de las mujeres, que venimos dando la batalla por décadas contra todas las formas de explotación, discriminación y subordinación.

Culminamos este periodo de trabajo organizativo 2020 con balance bastante positivo, partiendo de la realidad que vive la humanidad con la pandemia, la cual nos obligó a modificar nuestras estrategias de lucha, pasando de encontrarnos de manera presencial a desarrollar  trabajo virtual. Si bien la tecnología es arma del sistema capitalista, los pueblos tenemos el derecho de utilizarla a nuestro favor.

Así mismo con la llegada de la pandemia a nuestra América en marzo 2020, las mujeres nos planteamos mantener el compromiso asumido en la VI Asamblea de mujeres en la Habana, Cuba que planteamos “fortalecer la unidad en la diversidad para cambiar el sistema capitalista y neoliberal que pone los intereses del capital por encima de los derechos de los pueblos al buen vivir, a la protección y cuido de la madre tierra  y la soberanía alimentaria”.

La formación política e ideologica a nivel virtual ha sido la estrategia perfecta para fortalecer la lucha social en momentos de pandemia donde el capitalismo busca vulnerar la vida de la humanidad y particularmente de las mujeres del campo, con el aumento de la violencia doméstica como consecuencia del confinamiento establecida por los estados.

Esta realidad ha producido un impacto negativo en la reproducción y sostenibilidad de la vida que como resultado genera una feminización de los trabajos reproductivos, haciendo que las mujeres no tengan la capacidad de desarrollar actividades de oscio o recreación y de manera contraria, se presenten extremas jornadas de trabajos y situaciones de violencia dentro de las familias que son invisibilizadas. Este fenómeno ha implicado para la Articulación de Mujeres de la CLOC-LVC repensar nuestro trabajo y seguir luchando por una sociedad equitativa e igualitaria en la busqueda de cambiar la relaciones de poder desiguales en el medio rural.

La apuesta por la construcción del feminismo campesino y popular, desde nuestra evolución ha contribuído a repensar la vida de las mujeres en el campo. Principalmente para hacer frente a las distintas opresiones que han generado la cultura  capitalista y patriarcal  que articulan para desarrollar prácticas de carácter: misógina, sexista, androcéntrica y machista,  con el fin de objetivizar los cuerpos de las mujeres, creando desigualdades entre las relaciones de género en el medio rural.

La construcción feminista que se emerge desde los territorios y los pueblos del campo,  va tejiéndose junto a la promoción y la lucha accionaria de la campaña Basta de Violencia Contra las Mujeres del Campo, contra los agronegocios y los agrotóxicos, lo que implica: la lucha  por la vida, por la defensa de las Semillas que son Patrimonio de nuestros Pueblos al Servicio de la Humanidad, por el derecho igualitario a la tenencia de la tierra y contra la explotación, la violencia, el maltrato en el trabajo, y por salarios justos e igualitarios,  la agroecología como sistema de producción ancestral que garantice la Soberanía Alimentaria.

A nivel general saludamos los esfuerzo realizados por cada una de las regiones donde las mujeres desarrollaron diferentes acciones virtuales para contextualizar la vida de sí mismas frente a la pandemia y como el capitalismo hace uso de diferente armas para afianzar su hegemonía.

En este contexto las mujeres dejamos claro que ninguna pandemia podrá detener la producción campesina, el cuido y protección de la madre tierra, así como la lucha frente a sistemas opresores que valiéndose del confinamiento buscaban apropiarse de nuestros cuerpos, territorios y los bienes comunes.

Desde la Articulación de Mujeres de la CLOC-LVC, cerramos este 2020, con la esperanza de seguir fortaleciendo la lucha a todos los niveles con el objetivo de transformar el nivel de vida de las mujeres en el medio rural. 

A nivel orgánico tenemos el desafío de seguir trabajando la sistematización de nuestro recorrido histórico como mujeres del campo dentro de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo CLOC-LVC.

Nos encaminamos hacia nuestra V Escuela Continental de mujeres para el próximo año 2021, espacio que permitirá seguir profundizando sobre la construcción del feminismo campesino y popular, apuesta política que engloba la lucha de las mujeres en el medio rural.

Boletín Tierra Julio 2020

Desde la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo – CLOC-Vía Campesina te compartimos la edición julio 2020 de nuestra revisita digital Boletín Tierra.

Esta edición resalta la propuesta de la CLOC-Vía Campesina de volver al campo. Solo es posible derrocar el hambre y la desnutrición con la promoción de la agricultura familiar campesina e indígena. Incluye reflexiones de la juventud y los fundadores del movimiento campesino sobre la propuesta.

Además, también contiene noticias de las regiones que a pesar de las dificultades los procesos de producción, formación y lucha no se han detenido.

Leer el Boletín completo:

https://mailchi.mp/ee1d8ce8e292/boletin-tierra-julio-2020